“Es el momento de pedirle al Gobierno que gobierne” ha sentenciado Alfredo Pérez Rubalcaba en una rueda conjunta con Chimo Puig, secretario general del PSV.
El Ejecutivo se resiste a dar explicaciones y a aclarar los detalles de la negociación sobre el rescate a la banca. Las supuestas consecuencias las recibimos a cuenta gotas a través de filtraciones europeas y la prensa extranjera. “No es bueno lo que está pasando, nos enteramos a través de Bruselas de la letra pequeña”. Esta misma mañana, el ministro de Economía Luis de Guindos, a la salida de una reunión de urgencia en el Congreso, ha intentado rehuir de los medios de comunicación y su declaración ha sido escueta, y esa postura hermética del Gobierno ya no vale en Europa.
Los mercados apenas nos concedieron unas horas de aliento y sosiego tras la inyección de 100.000 millones de euros a los bancos españoles.
La retórica, recurso habitual de los ‘populares’ para referirse al rescate de la banca, genera inquietud en las fronteras extranjeras. El acoso de los mercados no cesa, la prima de riesgo roza la catástrofe y la incertidumbre que proyectamos carcome nuestra credibilidad.”En Europa no nos creen” ha declarado el secretario general del PSOE.
Pero, según el líder socialista no sólo Europa desconfía, también los ciudadanos españoles que apenas han recibido aclaraciones. “Gobernar es explicar a la gente y la gente está ansiosa por saber lo que ha ocurrido”, ha subrayado el jefe de la oposición.
Alfredo Pérez Rubalcaba mantiene su política de “prudencia” para no sembrar el desconcierto, consciente de la dificultad que atraviesa el país. Pero el líder socialista no puede quitarse dos ideas de la cabeza y está convencido de que “la desastrosa gestión de Bankia ha sido lo que ha provocado el rescate” y que la única solución para superar la dificultad es “el crecimiento, crecimiento y crecimiento”, porque “sólo pagaremos la deuda si crecemos”.
Para terminar, Pérez Rubalcaba en un “ejercicio de responsabilidad” ha pedido “solidaridad” para la Comunidad Valenciana y sus compañeros socialistas. Chimo Puig, aunque se ha mostrado optimista ha insistido en la gravedad que atraviesa Valencia porque las cosas “están muy mal”. Además, ha querido dejar claro que su Comunidad no es sólo “la del despilfarro y la corrupción”.
Marina García-Rico