La deuda de España puede llegar hasta el 99 % del PIB en 2015 si la economía crece menos de lo previsto hasta ahora, según se desprende de uno de los escenarios presentados por el Banco Central Europeo (BCE) en su boletín mensual de septiembre.
El BCE presentó varios escenarios sobre la posible evolución de deuda de las Administraciones Públicas en relación con el producto interior bruto (PIB), pero advierte de que «no deben interpretarse como previsiones».
El BCE recuerda que «las primas de riesgo excepcionalmente elevadas que se han observado en los precios de la deuda pública en algunos países de la zona del euro reflejan, entre otros aspectos, la preocupación de los inversores acerca de la sostenibilidad de dicha deuda».
A partir de un escenario base se construyen escenarios alternativos más adversos: un escenario adverso de crecimiento, un escenario de consolidación insuficiente y un escenario adverso de tipos de interés.
En el escenario base, la ratio de deuda alcanzará un máximo del 94 % en 2015 y luego disminuirá hasta situarse en torno al 77 % en 2020, incluido el impacto en la deuda pública de la ayuda del fondo de rescate temporal (FEEF) para el sector bancario.
Sin incluir la ayuda del FEEF en la deuda pública, la ratio de deuda en relación con el PIB llegaría al 85 % en 2015 y caería, posteriormente, hasta el 70 % en 2020.
En el escenario adverso de crecimiento, se supone que, entre 2013 y 2015, las tasas de crecimiento del PIB registradas y potenciales son cada año un punto porcentual más bajas que en el escenario base.
En este escenario adverso, el PIB se contrae un 1,5 % en 2013, crece un 0,2 % en 2014 y un 0,9 % en 2015.
Se supone que esta perturbación del PIB es permanente y provoca déficit (estructurales) más elevados a lo largo del horizonte considerado.
Según este escenario del BCE, la deuda en relación con el PIB alcanza un máximo del 99 % en 2015 y disminuye hasta el 88 % en 2020.
En el escenario de consolidación insuficiente, se considera que en el período 2012-2103, el Gobierno español solo consigue llevar a cabo la mitad del ajuste
estructural al que se comprometió y el saldo (primario) estructural en relación con el PIB sigue siendo más alto durante el horizonte completo.
Según este escenario, la deuda en relación con el PIB alcanza un máximo del 104 % en 2016 y disminuye, posteriormente, hasta el 103 % en 2020.
En tercer lugar se considera un escenario adverso de tipos de interés, según el cual, a partir de 2013, los tipos de interés de mercado (a todos los vencimientos) están 200 puntos básicos por encima de los tipos de interés en el escenario base.
De acuerdo con este escenario, la deuda de España en relación con el PIB alcanza un máximo del 96 % en 2015 y disminuye, posteriormente, hasta el 85 % en 2020.