El director general de Shale Gas España, David Alameda, ha garantizado este jueves la «total seguridad» del fracking al disponer de «tecnología suficientemente madura» y ha expresado su confianza en poder realizar los primeros pozos exploratorios en el año 2016.
Alameda, en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press, ha recordado que se han «realizado en el mundo dos millones» de fracturaciones hidráulicas y sólo en tres situaciones «se han constatado movimientos de 3,8 en la escala de Richter, practicamente imperceptibles al ser humano en superficie». Por este motivo ha rechazado las críticas realizadas por las plataformas antifracking en cuanto a la responsabilidad de las empresas en movimientos sísmicos como el registrado la semana pasada en Ossa de Montiel (Albacete).
«La industria dispone de la tecnología suficiente para poder controlar esos eventos microsísmicos y somos capaces de decir que no se van a producir esos terremotos que algunos sectores nos achacan en zonas de este país donde, ni siquiera, hemos empezado a perforar», ha indicado el representante de la plataforma de empresas de fracking.
Según las estimaciones de Alameda, el desarrollo de la industria de extracción del gas de esquisto permitiría obtener recursos para el consumo de gas en España durante unos 90 años a tenor de los consumos actuales de gas natural. «Estamos en fase de investigación porque lo que pretenden las empresas es saber qué tenemos y cómo se puede extraer de forma viable; será entonces cuando podemos estimar la cantidad de gas y ver qué impacto tendrán sobre las importaciones actuales que son prácticamente del 100 por cien», ha indicado.
En cuanto al desarrollo de proyectos, Alameda ha cifrado en 70 el número de proyectos que cuentan con licencia de exploración y existen otras 60 peticiones que aún no han sido concedidas.
Los proyectos más avanzados se encuentran ubicados en la cordillera vasco-cantábrico, donde existe el mayor potencial, según el director general de la patronal, especialmente al norte de Burgos. «Allí, recientemente, se han anunciado los primeros proyectos de investigación y esperemos que en 2016 seamos capaces de perforar los primeros pozos exploratorios», ha comentado David Alameda.
El director general de Shale Gas ha recordado, además del interés energético de los proyectos de fracking, la creación de empleo que supondría su desarrollo para «reactivar económicamente zonas que lo necesitan como son las rurales».