Parece ser que ni el Brexit ni la política de Trump afecta a las previsiones de crecimiento del Banco Santander. Su presidenta, Ana Botín, se ha mostrado confiada en la presentación de la cuenta de resultados del grupo que ha tenido lugar este miércoles en Madrid. La entidad ha obtenido un beneficio neto de 6.204 millones de euros en 2016, un 4 % más que el año anterior y en mayor parte gracias al aumento de ingresos por comisiones. Sobre la Cuenta 1,2,3, la ejecutiva ha asegurado que no han subido las comisiones.
Los inversores parecen haber dado el visto bueno a la estrategia del Banco. La mezcla de inversiones en mercados maduros y emergentes ha facilitado resultados suficientes para engujar la devaluación de las divisas en las que opera.
Mientras Botín presentaba las cifras, los inversores aumentaban la capitalización del banco y hacían subir su cotización, Confían en las promesas del banco para mejorar. aún más, en 2018.
Comisiones cuenta 1,2,3
Botín asegura que la Cuenta 1,2,3 “va muy bien, según lo planeado e incluso algo mejor” y que a día de hoy ya hay 2 millones de clientes ligados a esta cuenta. En cuanto a las nuevas condiciones de su servicio estrella, que el grupo anunció en diciembre y que se harían efectivas en febrero, la ejecutiva ha defendido que no han subido las comisiones.
«No hemos subido las comisiones de la Cuenta 1,2,3. Lo que pedimos a los clientes es que trabajen con nosotros y seamos su primer banco. Ofrecemos un tipo de interés del 3%, devolvemos recibos y entregamos acciones. A cambio de estas ventajas, pedimos vinculación al cliente. Es justo y transparente. Es nuestro modelo y el cliente puede decidir», ha defendido. «Tenemos que tener en cuenta los intereses de nuestros clientes, pero también debemos pagar dividendo a nuestros accionistas», ha argumentado.
Cómo afecta el Brexit
La presidenta del Banco Santander ha relatado que no se plantea reubicaciones del banco pese a la salida de Reino Unido de la Unión Europea y que la entidad mantiene sus previsiones de crecimiento en la región. Dice que el Brexit no afecta a su entidad salvo que afecte a sus clientes y es dónde están trabajando para lograr un acuerdo que sea bueno para sus consumidores ingleses.
“Hasta ahora no ha habido ningún cambio en las normas, es más expectativa de que pude pasar. De hecho, la economía de Reino Unido está ahora más fuerte de lo que se anticipaba en los últimos meses y esperamos que esto siga en los próximos. Todavía no se ha visto ningún efecto negativo, se podrá dar de varias maneras, puedo haber más inflación que sería una de las posibles consecuencias, pero habrá que ver cuáles son las condiciones finales del acuerdo de la salida. Lo que está claro que salen y habrá que ver en qué condiciones”.
En Reino Unido, el beneficio atribuido bajó un 14,7% (-4% sin efecto tipo de cambio) como consecuencia de la entrada en vigor del impuesto a la banca del 8% y del debilitamiento de la libra frente al euro tras el referéndum sobre la permanencia del país en la Unión Europea. Si excluimos estos efectos, el resultado antes de impuestos fue de 2.452 millones de euros, un 7,7% más, gracias al crecimiento del crédito y al menor coste de los depósitos, junto con la disciplina en el control de costes y la calidad del crédito.
Consecuencias de la política de Trump
Ana Botín explica que el efecto más inmediato es sobre México pero que la política de Trump en relación a este país no va a cambiar las previsiones y objetivos del grupo Santander. “México es un país que ha hecho reformas estructurales en energías, infraestructuras, que tiene 120 millones de personas muy preparadas y acuerdos comerciales con otros 40 países. Por tanto, el efecto va ser más por el tipo de cambio en nuestros beneficios, ya que México representa el 7% del grupo, así que no van a cambiar las previsiones que tenemos y los objetivos para el grupo”.
Capote a la banca en España
La presidenta del Banco Santander considera que la confianza es “esencial” para el mercado financiero. Destaca que los bancos españoles a lo largo de la crisis no requirieron de ninguna ayuda pública y contribuyeron con 20 millones de euros al saneamiento de las cajas.
Ante el deterioro generalizado de la imagen del sector, ya sea por los desahucios, las preferentes o ahora por las cláusulas suelo, Botín cree que la clave está en que las entidades siguen dando “buenos servicios a precios competitivos” y sobre todo hace especial hincapié en que se deberían mantener los principios fundamentales como son la seguridad jurídica y la transparencia.
Beatriz Jiménez