Durante el primer trimestre de 2017, el valor añadido bruto (VAB) del conjunto de la muestra de empresas de la Central de Balances Trimestral (CBT) que publica el Banco de España aumentó, en términos, un 1,1% en comparación con el mismo período de 2016, tasa muy similar a la registrada un año antes (1,0%).
No obstante, la evolución de este excedente, confirma el Banco de España, se ha visto influida por el comportamiento desfavorable de algunas compañías muy grandes que tienen un peso destacado en esta muestra, concentradas sobre todo en el sector de la energía. Excluyendo esta rama, el VAB creció un 4,6%, muy por encima del incremento del 1,8% registrado por este mismo agregado el año anterior.
Los resultados aumentaron, en términos interanuales, un 10,9%, impulsado por la favorable evolución tanto de los ingresos financieros (por los mayores dividendos percibidos) como de los gastos de esta misma naturaleza, que se redujeron gracias al descenso de los costes medios de financiación.
El curso de las partidas no recurrentes, en cambio, ejerció un impacto negativo sobre el resultado final, debido principalmente a las menores plusvalías generadas en operaciones de ventas de activos financieros.
Actividad económica
La evolución de la actividad productiva tuvo lugar en un contexto en el que tanto las compras como las ventas al resto del mundo ganaron importancia.
Así, en el primer caso, las importaciones pasaron a suponer un 29,3% respecto del total de las compras realizadas por las empresas de esta muestra, casi un punto más que el año anterior. Por su parte, las ventas al exterior pasaron a suponer un 21,4% respecto al total de la cifra neta de negocios, siete décimas más que en el primer trimestre de 2016.
Por sectores, se observa una fuerte heterogeneidad, pues mientras que en algunos, como el de la industria o el del resto de actividades, se registraron incrementos sustanciales del VAB, en el resto hubo descensos.
Así, en la industria este excedente creció un 15,8. En cambio, en la rama de la energía el valor añadido descendió un 12,1%, debido principalmente a los mayores costes de producción soportados por algunas de sus principales compañías, en un contexto de ascenso de precios de las materias primas.
Por su parte, en las empresas de comercio y hostelería y las de información y comunicaciones también se registraron descensos en esta variable, aunque más moderados: del 3,6% y del 2%, respectivamente.
El empleo
Por su parte, el empleo de la muestra registró un incremento interanual del 1,5% durante los tres primeros meses de 2017, dato ligeramente inferior al del año previo (1,7%). Por tipo de contrato, siguió siendo el temporal el que creció con más fuerza (un 8,1%), en tanto que el fijo avanzó muy moderadamente (0,3%).
Por tipo de contrato, se observa que la recuperación del empleo sigue caracterizándose por ser más intensa en el de carácter temporal, que aumentó un 8,1%. Los empleos fijos de esta muestra, en cambio, avanzaron muy moderadamente (la tasa fue de un 0,3%), dato que está en parte afectado por los ajustes de plantilla que han tenido lugar en algunas grandes empresas.
Por sectores, se observa también una cierta dispersión en la evolución del empleo, aunque menos marcada que en el caso del VAB. Así, en las ramas de industria, comercio y hostelería, y la que engloba al resto de actividades se observaron incrementos en el número medio de trabajadores, con tasas del 1,9%, 2,8%, y 2,3%, respectivamente. El sector de energía, por su parte, presentó una variación de sus plantillas ligeramente negativa (del 0,6%), mientras que el de información y comunicaciones registró un importante descenso (de un 4%).
Miguel de la Balsa