El INE, que adelantó estos datos el pasado 30 de abril, también confirma un crecimiento interanual de la economía del 2,4 % en el primer trimestre, una décima por encima del registrado en el último de 2018.
La contribución de la demanda nacional al crecimiento interanual del PIB fue de 2,2 puntos, tres décimas inferior a la del cuarto trimestre; mientras que la demanda externa presenta una aportación de 0,2 puntos, cuatro décimas superior a la del trimestre pasado.
En tasa interanual, el consumo moderó cuatro décimas su crecimiento hasta el 1,6 %, lastrado por el de los hogares, que bajó cinco décimas y el de las Administraciones Públicas, que se redujo otras dos.
De vuelta a la tasa trimestral, cambia ligeramente el crecimiento de cada uno de los sectores frente al dato de finales de abril.
Así, el consumo de los hogares creció el 0,4 %, una décima más de lo anunciado y mantiene el ritmo del trimestre anterior; mientras que la inversión se moderó una décima frente al dato anunciado, hasta quedar en el 1,4 % frente a la caída del 0,2 % del trimestre anterior.
También en comparativa trimestral, las exportaciones se mantuvieron estables, frente al alza del 0,7 % del trimestre anterior, y las importaciones cayeron el 0,3 % frente al comportamiento plano, 0,0 %, del trimestre anterior.
En cuanto al empleo, en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, sube un 0,7 %, una décima más que en el cuarto trimestre.
Frente al año pasado, el empleo aumenta a un ritmo del 2,8 %, dos décimas superior a la del cuarto trimestre, lo que supone un incremento de 510.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año.
En cuanto al coste laboral unitario, se sitúa este trimestre en el 2,1 %.
Finalmente, la remuneración media de los asalariados mejoró cinco décimas hasta crecer el 1,6 % anual con un aumentó del 3,3 % en el número de empleados.
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