Hasta la fecha, el Banco Santander ha ejecutado ya más del 95 % de las salidas, lo que supone que la entidad ha recortado su plantilla en 3.069 trabajadores.
En la jornada de este miércoles, los representantes de los trabajadores y de la entidad que preside Ana Botín han mantenido un encuentro dentro de la Comisión de Seguimiento del citado ERE.
Según ha denunciado UGT, han trasladado al banco sus quejas por las «prácticas abusivas» que se han utilizado para conseguir las adhesiones voluntarias, y «el escaso interés» mostrado en aquellas personas que sí se han postulado casi desde primera hora con una adhesión voluntaria decidida realmente por ellos.
«Esta empresa y las personas que gestionan Recursos Humanos en algunos territorios han utilizado la voluntariedad, y las primas que conllevan, de forma torticera para conseguir adhesiones voluntarias de forma forzosa», ha añadido el sindicato.
«El banco ha dejado un paisaje desolador», ha manifestado UGT, que en este sentido ha acusado al Santander de llevar a cabo «prácticas de presión, e, incluso, nos atreveríamos a decir de acoso» en los últimos días del periodo para adherirse de forma voluntaria al ERE.