Así, a las 9.15 horas, el principal indicador del mercado nacional, el IBEX 35, avanzaba 65,1 puntos, ese 0,94 %, hasta 7.015,6 enteros. Las pérdidas que acumula este año descienden al 26,54 %.
En Europa, con el euro ligeramente a la baja y un cambio de 1,177 dólares, las subidas eran menores: Londres el 0,69 %; París el 0,61 %; Milán el 0,37 % y Fráncfort el 0,24 %.
Los nuevos estímulos para desempleados aprobados el sábado pasado por el presidente estadounidense, Donald Trump, se convertían en un acicate para las bolsas por la incidencia económica que tendrán.
Además, Wall Street había cerrado el viernes con pequeñas ganancias (el índice Dow Jones de Industriales avanzó el 0,17 % y el S&P 500 el 0,06 %, aunque el Nasdaq cayó el 0,87 % después de haber registrado varios máximos históricos consecutivos).
Las sanciones impuestas por Estados Unidos a Hong Kong afectaban a la bolsa de este enclave, que bajaba el 0,6 %, mientras que el parqué de Shanghái subía el 0,35 % después de que se conociera que la inflación había crecido en China dos décimas en julio y se había situado en el 2,7 %, signo de animación económica. Tokio permanecía cerrada por festivo.
Los bancos, por la posibilidad de que se produzcan fusiones en el sector, lideraban los avances de la bolsa (su índice sectorial se revalorizaba el 3,5 %), con lo que Liberbank comandaba las subidas del mercado continuo al ganar el 5,69 %.
Otras entidades ocupaban del segundo al sexto puesto del IBEX: el Banco Sabadell subía el 4,16 %, seguida por CaixaBank, con un alza del 3,8 %; el Banco Santander ganaba el 3,41 %; Bankia el 3,32 % y el BBVA el 3,09 %, en tanto que Unicaja avanzaba el 2,94 % y Bankinter el 1,97 %.
IAG presidía las subidas del IBEX con un repunte del 4,19 %, mientras que solo bajaban seis compañías de ese indicador: Grifols el 0,57 %; Cellnex el 0,35 %; Viscofán el 0,24 %; Siemens el 0,19; Endesa el 0,13 % e Iberdrola el 0,08 %.
El resto de los grandes valores subía: Repsol el 2,31 %, Telefónica el 1,27 % e Inditex el 0,89 %.
La cotización del oro bajaba levemente, el 0,1 % y se situaba en 2.033 dólares.
El rendimiento de la deuda española a largo plazo avanzaba al 0,29 % y la prima de riesgo se situaba en 79 puntos básicos.
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