Este dato supone moderar una décima la evolución de julio -cuando descendieron un 0,6 %- pese a que el sector turístico siguió lastrando la evolución de los precios.
Con el dato de agosto, la inflación encadena cinco meses de tasas negativas, con descensos del 0,7 % en abril, el 0,9 % en mayo, el 0,3 % en junio y ese 0,6 % de julio, en plena pandemia de COVID en la que los precios volvieron a terreno negativo tras casi cuatro años en positivo.
En la moderación de agosto destaca el comportamiento de la vivienda, cuya caída de precios se moderó al 2,7 %, debido al encarecimiento de la electricidad que hace un año se abarataba.
También mejoró el comportamiento de los hoteles, cafés y restaurantes, que aumentó dos décimas sus precios, hasta el 0,5 %, por el encarecimiento de los servicios de alojamiento.
Dentro del sector del transporte, los precios moderaron su caída al 4,4 %, por el encarecimiento de los carburantes y lubricantes, cuyo impulso al alza fue frenado por el abaratamiento del transporte aéreo de pasajeros.
A la baja de los precios tiró el sector del ocio y cultura, cuyos precios aceleraron su descenso al 2,1 % debido al menor incremento de los paquetes turísticos.
La inflación subyacente -que no tiene en cuenta los precios de los alimentos ni los productos energéticos por ser los más volátiles- se situó en agosto en el 0,4 %, con lo que se estableció nueve décimas por encima del índice general.
El INE también ha publicado los precios de los bienes y servicios COVID-19, un indicador creado para analizar la evolución de los productos más consumidos por los hogares durante la pandemia.
Los bienes COVID-19 -que incluyen alimentación, bebidas, tabaco, limpieza o productos farmacéuticos- se encarecieron un 1,7 % en agosto, una décima menos, por el menor abaratamiento de frutas, y de la leche, queso y huevos.
Los servicios COVID-19 -que incluyen alquiler de vivienda y garaje, distribución de agua, electricidad, gasóleo para calefacción, comisiones bancarias o televisión en línea- se abarataron un 2,1 %, ocho décimas menos que en julio, por el encarecimiento de la electricidad.
En agosto los precios bajaron en todas las comunidades autónomas -salvo en Canarias, donde subieron un 0,5 %-, especialmente en Navarra y Cataluña, con caídas del 0,9 % y el 0,8 %, respectivamente.
Por lo que respecta a la evolución mensual, los precios se mantuvieron estables con respecto a julio, ante el abaratamiento de frutas, calzado, prendas de vestir y gas; y el encarecimiento de los servicios de alojamiento, paquetes turísticos, electricidad, pescado y marisco y carne.
El índice de precios de consumo armonizado (IPCA) -que permite realizar comparaciones internacionales- descendió en agosto un 0,6 % en términos anuales y se mantuvo sin cambios en datos mensuales.
El INE aclara que, una vez finalizado el estado de alarma, se ha retomado la recogida presencial de los datos de precios, aunque se mantiene la telemática en algunos casos.
Estrella Digital