La consejera de Empleo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, ha afirmado este miércoles que estarán «muy vigilantes» ante el proceso de negociación para el despido de trabajadores del grupo Unicaja Banco, tras su fusión con Liberbank, como una forma de no fiarse de la entidad.
En declaraciones a los periodistas en Sevilla, Blanco ha dicho que estarán atentos al desarrollo del periodo de consultas y pedirán informes a la Inspección de Trabajo, «controlando mucho que el empleo, en la medida de lo posible, se pierda el mínimo».
«Un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) nunca es una buena noticia», ha subrayado la consejera, quien ha realizado estas manifestaciones después de que Unicaja Banco plantease este martes a los sindicatos el despido de 1.513 empleados del grupo con el fin de reducir costes y mejorar su eficiencia, según fuentes cercanas a la negociación
Blanco ha añadido que, como autoridad laboral, la Consejería de Empleo estará vigilando para garantizar que se siga la normativa del Estatuto de los Trabajadores.
La negociación se lleva a cabo tras la fusión de Unicaja Banco y Liberbank, que supuso la creación del quinto banco del país, con un volumen de activos cercanos a los 113.000 millones, y presencia en el 80 % del país, siendo la entidad de referencia en Andalucía, Extremadura, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cantabria y Asturias.
Unicaja Banco, que sigue teniendo su sede social en Málaga, suma más de 4,5 millones de clientes y unas 1.400 oficinas.EFE
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