A finales del año pasado, los economistas vaticinaban la entrada de Europa en una recesión económica a lo largo de este 2023. Pero un fin de año mejor de lo esperado, y la moderación de la inflación que se ha producido en los últimos meses, han hecho cambiar las previsiones.
Los informes presentados el pasado otoño por las instituciones europeas y los especialistas en análisis dejaban poco margen para la duda a la hora de hablar de una previsión de la contracción de la economía durante el invierno. Pero los datos que ha presentado la Comisión Europea esta semana ponen de relieve que las predicciones no se han cumplido.
El precio del gas da un respiro
La invasión de Ucrania ha tenido un fuerte impacto en el precio de los combustibles, elevando el precio del gas a lo largo de 2022 a niveles que no se habían visto hasta entonces.
Desde Europa, a la vez que se han impuesto sanciones a Rusia, se han buscado nuevas fuentes de suministro de gas para no depender de este país, y se ha adoptado una política de contención de la demanda de este combustible. Los resultados de estas medidas se están dejando ver ahora.
Paolo Gentiloni, comisario europeo de Economía, ha manifestado que la economía de la Unión Europea viene experimentando una evolución positiva desde el otoño pasado, algo que está causado en gran medida por la moderación del precio del gas. Al caer la demanda por la política de ahorro y existir nuevas fuentes de suministro, el precio del gas ha bajado y se encuentra ya por debajo del precio que tenía antes del inicio de la guerra.
En agosto de 2022, el precio del gas marcaba máximos históricos con 350 euros el kilovatio por hora, pero en las últimas semanas se ha situado en torno a los 60 euros.
Un escenario un poco más optimista para España
El Gobierno español pronostica un crecimiento del 2,1% para la economía española en este 2023, el Banco de España cree que será de un 2,7%, y el FMI de un 2%. El pasado mes de noviembre, los técnicos de la Comisión Europea recortaron las expectativas de crecimiento hasta situarlas en un 1%.
En la última reunión de la Comisión se han presentado datos más positivos que los de finales de 2022, lo que hay llevado a la institución a hacer nuevos ajustes en sus previsiones de crecimiento. En el caso de España, su crecimiento estimado para este año es del 1,4%, y del 2% para 2024. De cumplirse las predicciones, la española sería una de las economías europeas que más crecería este año.
Sin recesión en invierno de 2023
La economía europea ha experimentado múltiples vaivenes en los últimos meses y las predicciones para este invierno no eran positivas. Con el precio del gas en máximos históricos, la llegada del frío y del incremento de la demanda preocupaban especialmente, porque una subida excesiva de los costes podría lastrar el crecimiento económico en muchos sectores.
Pero las peores expectativas no se han cumplido. Las medidas tomadas para controlar el precio del gas están siendo efectivas y, además, el inverno ha sido más cálido de lo habitual en muchos puntos de Europa, lo que ha contribuido a mantener baja la demanda.
Los comisarios creen ahora que Europa ha esquivado la recesión, que ni tan siquiera se podrá hablar de una recesión técnica. Pero ponen de relieve que la situación económica es todavía bastante incierta.
La economía europea ha resistido frente a la crisis provocada por la invasión de Ucrania, la inflación se está moderando poco a poco, y los niveles de desempleo están en mínimos históricos. Los comisarios consideran que hay motivos para el optimismo, porque llegan noticias alentadoras, pero que todavía quedan unos cuantos meses difíciles por delante.