Las dos cajas gallegas -Caixa Galicia y Caixanova-, y los sindicatos con representación entre los empleados -CCOO, Csica, CIG, UGT y CGT-, constituirán formalmente la mesa laboral después de que, el 29 de junio, las dos entidades de crédito den el visto bueno al documento definitivo del protocolo económico para la fusión, que se dará a conocer de forma «simultánea» a los consejos de administración y a las organizaciones sindicales. Así lo explicaron fuentes de los sindicatos tras la reunión mantenida hoy con los responsables de relaciones laborales y recursos humanos de Caixa Galicia y de Caixanova.
Los responsables de las cajas transmitieron a las organizaciones sindicales que la previsión es tener finalizado el borrador del documento económico entre el 10 y el 14 de junio, «seguramente el 14, apuntaron tanto UGT como CCOO.
El compromiso es darlo a conocer en esa fecha a los representantes de los trabajadores, a los que aún no se les informó del coste laboral que tendrá la integración de ambas entidades, si bien los sindicatos confían en que se mantengan en el entorno de las cifras que se dieron en las últimas jornadas de negociaciones entes de anunciar el acuerdo para iniciar la fusión.
En ese momento, las cajas calcularon que sería necesario reducir en casi 1.000 trabajadores la plantilla y cerrar algo más de 200 oficinas.
El siguiente paso, tras adaptarse a las exigencias que pueda hacer el Banco de España cuando reciba el borrador, será que los órganos de dirección de las cajas den su visto bueno al documento definitivo el 29 de junio, momento en que también se trasladará a los sindicatos y tras el que se constituirá la mesa laboral.
En este grupo de trabajo se sentarán, según la propuesta presentada hoy con el acuerdo de las cinco fuerzas sindicales, seis representantes de CC.OO.; cuatro de Csica; tres de CIG; dos de UGT y uno de CGT. De este modo, la representación sería proporcional al apoyo con el que cuentan entre los empleados de ambas cajas en la actualidad.
Asimismo, los sindicatos proponen dos asesores por cada organización que también participarían en la mesa, más cinco externos, que no estarían directamente en ella pero aconsejarían a los representantes.
Participar en el documento
El portavoz de CCOO en el proceso de negociación de las condiciones laborales de la fusión, Luis Mariño, manifestó que lo que «no gusta» a esta formación es que el documento económico definitivo sea aprobado por las cajas sin que hayan participado los sindicatos.
«Nos encantaría que el proyecto definitivo fuese ya con la firma de todos los sindicatos, pero no va a ser así, admitió y lo atribuyó a la necesidad de ajustarse a los plazos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que expira el 30 de junio.
Por su parte, el representante de UGT, José Ramón del Pliego-Valdés, consideró que sería «más fácil» decidir ahora qué oficinas cerrar «y no cuando ya está hecho -el protocolo económico-«.
«Nos gustaría trabajar en el documento desde ya y antes de la presentación del documento provisional, dijo.