La Caja de Ahorros de Segovia no prevé acercarse a la nueva entidad surgida de la fusión de las Cajas España y Caja Duero, aprobada por sus respectivas asambleas, y se centra en trabajar en la «fusión fría» en torno a Caja Madrid. Los consejos de administración de las cajas de Segovia y Ávila rechazaron el protocolo de unión a Banca Cívica y trabajan ahora por un Sistema Institucional de Protección (SIP) donde, junto con Caja Madrid, participan inicialmente Caixa Laitena, Caja Insular de Canarias y Caja Rioja.
Preguntados por el hecho de que, tanto la Junta de Castilla y León como el PSOE verían con buenos ojos un acercamiento de las Cajas de Segovia y Ávila a la nueva entidad fusionada, miembros del consejo de administración han dicho que no lo prevén.
Algunos consejeros, que han pedido mantener el anonimato, han explicado que «lo de Caja España y Caja Duero es una fusión y nosotros estamos trabajando en un SIP con Caja Madrid, son dos cosas que no tienen nada que ver entre sí».
En este sentido, han insistido en que ambas entidades tienen que terminar de perfeccionar la fusión, con tranquilidad, mientras que Caja Segovia trabaja en torno un SIP.
Por el momento, Caja Segovia no ha convocado consejo de administración con el fin de adherirse al protocolo del SIP con Caja Madrid, lo que debería hacerse antes del próximo 15 de junio, con el fin de que se pueda recurrir al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
El consejo se podría celebrar, de acuerdo con estas fuentes, en torno a los próximos jueves o viernes.
Algunos consejeros de Caja Segovia confían en que el proyecto del SIP con Caja Madrid le guste a la Junta de Castilla y León que ha anunciado que, a priori, no ejercerá el derecho de veto.
Asimismo han insistido en que no se aceptó la opción de Banca Cívica, por mayoría, porque no se cumplían una serie de mínimos y era perjudicial para Caja Segovia, además de que se les obligó a tomar la decisión, «de la noche a la mañana».