Toyota, primer fabricante mundial de vehículos, reanudó este lunes la producción en 18 plantas japonesas después de que los efectos del terremoto y el tsunami del 11 de marzo paralizara casi por completo su actividad durante cinco semanas. Hasta el 27 de abril el volumen de producción será la mitad del habitual, dijo un portavoz del grupo, Paul Nolasco.
Algunas de estas las 18 plantas que arrancaron este lunes elaboran también piezas empleadas en las cadenas de montaje de la empresa, añadió el portavoz. Las factorías de compañías afiliadas en las provincias de Miyagi e Iwate, dos de las más afectadas por la catástrofe, también han comenzado a funcionar, según informa por su parte la agencia local Kyodo.
El 14 de marzo la empresa se vio obligada a detener la producción de vehículos en Japón por las consecuencias del seísmo, aunque el 28 de ese mes retomó la fabricación de su modelo Prius y de dos de su marca Lexus.
El reinicio de actividad de la compañía se debe a que gran parte de sus proveedores ya han vuelto a elaborar y enviar piezas, según Nolasco, que precisó que ahora solo hay complicaciones con el suministro de 150 piezas, «mientras que hace dos semanas había problemas con unas 500».
Las plantas estarán paradas del 28 de abril al 9 de mayo, coincidiendo con los festivos de la «Golden Week», la «semana dorada» japonesa.
Entre el 10 de mayo y el 3 de junio Toyota planea no detener las fábricas ningún día y espera mantener el volumen de producción en torno al 50 por ciento.