El presidente de Ryanair, Michael O’Leary, considera que la «quiebra» de Spanair supone «buenas noticias para el turismo y el empleo en España», ya que, a su juicio, «permitirá la llegada de nuevas aerolíneas, que ocuparán su lugar y, al mismo tiempo, incrementarán el tráfico ofreciendo tarifas más bajas y un servicio más eficiente».
En una rueda de prensa en Palma, O’Leary ha sostenido que una compañía como Spanair con unas «altas tarifas que no es capaz de sobrevivir, no se merece vivir en el mercado», al tiempo que ha indicado que la situación de la aerolínea «no es nueva, sino que se venía arrastrando en los últimos años y con los distintos propietarios que ha tenido la compañía últimamente».
Por otro lado, ha acusado a Aena, por los «altos costes de las tasas» que impone a las aerolíneas, de ser «una de las causas» del cierre de Spanair y, en esta línea, ha criticado el «monopolio» del gestor aeroportuario, que va «en detrimento del desarrollo del transporte aéreo».
Así, ha indicado que ante esta situación, se hace «necesario» llegar a acuerdos con las administraciones públicas para lograr «incentivos de marketing», sobre todo durante los meses de invierno, con el fin de «paliar los altos costes de las tasas aeroportuarias, que son los mismos que en verano».
De este modo, ha apuntado que su aerolínea ya está en conversaciones con el Govern balear y con el aeropuerto de Palma para definir el calendario de invierno, si bien ya ha rechazado la posibilidad de cubrir las rutas interislas, dado que, según ha apuntado, son «demasiado cortas» para los aviones de Ryanair.
30 NUEVOS AVIONES Y 1.500 NUEVOS EMPLEOS.
«Los aeropuertos españoles están compitiendo en desventaja con el resto de aeropuertos europeos», ha censurado O’Leary, quien ha anunciado que su aerolínea ha pedido para los próximos meses 30 nuevos aviones, que generarán 1.500 empleos directos (500 de pilotos, 850 de tripulantes de cabina y 150 de ingenieros).
En esta línea, ha anunciado que la próxima semana, Ryanair comenzará a seleccionar al nuevo personal, por lo que ha instado a los trabajadores de Spanair a que se presenten a los procesos de selecciones, si bien ya ha avisado de que, a diferencia de lo que ha anunciado Vueling, no tendrán «prioridad», sino que se tratará a los candidatos de manera «igualitaria».
Concretamente, 16 de los aviones comenzarán a operar entre enero y abril y, de ellos, cinco estarán en la nueva base de Ryanair en Palma, mientras que los 14 restantes llegarán entre octubre y diciembre. Asimismo, ha detallado que cada uno de ellos generará 50 empleos directos.
Estrella Digital/EP