Ramón Bilbao viñedos de altura, uno de los vinos más innovadores de esta bodega, luce nueva imagen. Rodolfo Bastida, Director General y Director Técnico de la firma vitivinícola, junto con el explorador Ramón Larramendi, han sido los encargados de presentarla en público esta semana y recordar los valores que hacen único a este vino.
Un vino de carácter floral elaborado con Tempranillo procedente de viñedos ubicados en Abalos y Garnacha en Tuledilla (La Rioja), a 700 metros de altura, y con el que la bodega manifiesta su afán por descubrir y elaborar vinos singulares más identificados con el terroir y el entorno en el que se producen, apostando por mostrar una Rioja diferente.
La nueva imagen es más “atrevida y actual”, diferencial dentro del universo de ilustraciones de Ramón Bilbao, con la que la bodega refleja su posicionamiento con la imagen de un explorador escalando una montaña, un guiño a la altura de los viñedos de donde procede la uva con la que se elabora.
La primera palabra en la presentación la tuvo Batista quién destacó que, “Ramón Bilbao Viñedos de Altura recoge nuestra visión más innovadora: un vino para un público curioso e inquieto, que invita a vivir una aventura y descubrir una Rioja diferente, arraigada a su identidad clásica pero capaz de sorprender con vinos frescos, frutales y elegantes”.
Habitualmente en Ramón Bilbao trabajan con un grupo de viñedos cerca de la bodega, una zona que está a 450 metros de altitud, pero que, según Batista, se ha visto afectada por el cambio climático del que se habla y que ellos han podido comprobar de primera mano. De ahí, y con el ánimo de darle un giro a los vinos y descubrir nuevos sabores y sensaciones, se «atrevieron» a explorar algunas zonas con más altitud en la región.
Para reflejar el espíritu de aventura que representa a este vino, el explorador Ramón Larramendi, pionero español en organizar expediciones polares, acompañó al Director General de Ramón Bilbao en el acto y deleitó a los presentes al contar su pasión por la búsqueda en la vida.
“La aventura y la curiosidad son una filosofía de vida, en mi afán por descubrir nuevas sensaciones que sorprendan. Intento ser explorador en todos los ámbitos de mi vida porque la exploración es un estado de ánimo, es una manera de enfrentarse al mundo” explica Larramendi quién también resaltó sentirse identificado con la firma de vinos, “me identifico con esa pasión de probar cosas nuevas, los viñedos plantados a 700 metros de altura es totalmente infrecuente y pienso que es una apuesta excelente y de auténtica exploración”.
Los asistentes pudieron realizar un viaje de altura, sobrevolando en ultraligero la Sierra de Madrid. Una experiencia única en la que sintieron la pasión por descubrir y crear nuevos caminos, mirando el mundo con otros ojos, como hace Ramón Bilbao redescubriendo La Rioja con vinos con estilo propio como Viñedos de Altura.
El chef Ignacio Echapresto, que con su restaurante Venta Moncalvillo ha hecho de Daroca de Rioja el pueblo más pequeño del mundo con un restaurante con estrella Michelin, elaboró para la ocasión un menú para tocar el cielo, maridando las notas singulares de Ramón Bilbao Viñedos de Altura con su cocina de vanguardia que lleva La Rioja al plato.
Beatriz Jiménez