Brasil amanecía este jueves con un desplome en el mercado bursátil de la capital financiera brasileña que ha arrastrado a grandes compañías españolas. A la crisis política por la que pasa el país se ha sumado un nuevo caso de corrupción que ha situado en el punto de mira al presidente de la República, Michel Temer, y ha provocado una caída del 10% en el principal índice brasileño, el Bovespa. Además, el dólar sube más de un 6% frente al real brasileño, que se desploma frente a las principales divisas internacionales.
Tras una supuesta grabación, aún no publicada, en la que Temer presuntamente autoriza a un empresario a sobornar al expresidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, el mayor ETF sobre la bolsa de Brasil se desplomaba en la preapertura del mercado americano después de la oposición haya pedido la dimisión de presidente.
La Bolsa de Sao Paulo inició la jornada de este jueves con fuerte tendencia negativa y, tras diez minutos de subastas, su índice Ibovespa se desplomaba un 8,47 %, hasta 61.820 puntos, tras el escándalo de corrupción. En el mercado de cambios, el real brasileño, igualmente afectado por el escándalo, abrió con una fuerte depreciación del 6,89 % frente al dólar, que era vendido a 3,315 reales.
Empresas golpeadas
Grandes empresas españolas se han visto golpeadas a lo largo de la jornada del jueves, entre las más expuestas destaca Santander, que baja un 4,43%. A esta le acompañan otras compañías con intereses en Brasil como Prosegur, que cae más de un 5%, Mapfre que se deprecia más de un 4% al igual que Telefónica.
En el parqué europeo destacan los descensos de Telecom Italia, la irlandesa Experian, o la caída del grupo de supermercados francés Casino, el mayor minorista del país sudamericano. También retroceden compañías como Volkswagen o ABInBev, tras conocerse que Michel Temer fue grabado por Joesley Batista, uno de los dueños del gigante cárnico JBS.
Destitución de Temer
Algunos líderes han pedido que Temer renuncie y varios legisladores han solicitado que se inicie un proceso para destituir al mandatario. Una situación que ha agravado, sin duda alguna, la crisis política de Brasil y que crea una incertidumbre y una inseguridad jurídica letal para los negocios.
En un comunicado, Temer niega las acusaciones y se ha declarado víctima de una conspiración. No obstante, la oficina de Temer reconoce la reunión con Batista, quien utilizó un dispositivo oculto para grabar la conversación. Según el diario O Globo, Batista le comenta a Temer que está pagando todos los meses a Cunha por su silencio, a lo que el presidente le responde: “Eso tienes que mantenerlo, ¿vale?” .
Beatriz Jiménez