Esta decisión no solo beneficiará a las empresas promotoras, sino que también está enfocada a favorecer al comprador final de las viviendas, ya que el préstamo promotor será subrogable, con bonificación, a hipotecas minoristas para aquellos que finalmente adquieran las viviendas.
“Bankia cuenta con un modelo de gestión responsable comprometido a trabajar por la sostenibilidad de nuestro entorno a través de distintas iniciativas, entre ellas con el desarrollo de productos bancarios y financiación de proyectos que contribuyan a la consecución de objetivos medioambientales”, afirma Alberto Manrique, director de Promotores de Bankia.
Firmas certificadoras internacionales
Bankia bonificará la financiación de las promociones certificadas por las principales firmas internacionales en este ámbito de actuación, como la británica BREEAM (Building Research Establishment Environmental Assessment Methodology) o la norteamericana LEED (Leadership in Energy & Environmental Design). En el caso de la primera promoción bonificada por Bankia, la certificación será realizada por BREEAM.
Para obtener la bonificación, la promoción tendrá que contar con el certificado de construcción sostenible emitido por BREEAM con una de sus cuatro mejores notas: ‘bueno’, ‘muy bueno’, ‘excelente’ o ‘excepcional’. Queda excluido el rating inferior, denominado ‘correcto’, o sus equivalentes en otras firmas certificadoras.
Bonificación entre 0,10 y 0,20 puntos en el tipo de interés
El interés aplicado estará en función de la calidad crediticia de la empresa promotora, pero en todo caso será entre 0,10 y 0,20 puntos inferior al que correspondería si el proyecto no contase con certificado de construcción medioambiental.
La bonificación sobre el tipo de interés aplicado por Bankia compensará en parte el mayor coste adicional que puede suponer la construcción bajo criterios medioambientales respecto a las que no lo son y que los expertos de BREEAM cuantifican en el entorno del 2% (en función del grado de calificación).
Los edificios medioambientalmente sostenibles presentan beneficios económicos, tanto para los usuarios como para los propietarios. Un edificio que cumpla con estos estándares disminuye el consumo energético entre un 50%-70%, rebaja el consumo de agua en un 40%, los gastos de funcionamiento y mantenimiento son entre un 7% y un 8% inferiores a lo habitual y el valor de los inmuebles aumenta por la calidad de su construcción.
A lo anterior hay que añadir otra serie de ventajas, como el empleo de materiales saludables, la gestión de residuos, el aislamiento acústico o la calidad del aire.
Aspectos a certificar en las promociones de viviendas
A la hora de certificar una vivienda, lo habitual es que se tengan en cuenta aspectos como las emisiones de CO2, la iluminación e instalaciones eficientes, el acceso a transporte público, que cuente con aparatos eficientes para el consumo de agua, el uso de materiales con un bajo impacto medioambiental o una gestión eficaz y adecuada de residuos, entre otros.
La entidad retomó la actividad de crédito promotor el pasado primero de enero tras concluir las restricciones establecidas en el Plan de Reestructuración firmado por la entidad con la Comisión Europea hace más de cinco años.
Para ello, Bankia incorporó a su organización la Dirección de Promotores, responsable de desarrollar la financiación al negocio promotor en un momento de repunte del ciclo, “con un crecimiento esperado durante al menos tres o cuatro años en los que estimamos una construcción, al final de dicho periodo, de hasta unas 150.000 viviendas nuevas al año”, comenta Manrique.
Los otros productos financieros sostenibles de Bankia
Bankia ya cuenta con varios productos y servicios orientados a la consecución de objetivos medioambientales.
El primer producto de este tipo que lanzó la entidad fue el Fondo Sostenible, un fondo de inversión de renta variable global que utiliza la estrategia de inversión socialmente responsable de más reciente definición, denominada ‘inversión de impacto’, que es aquella que persigue tanto la rentabilidad financiera como el impacto social o medioambiental positivo, medido activamente.
El segundo producto está enfocado a financiar a un interés ventajoso la adquisición de bienes de consumo que favorezcan la eficiencia energética, la lucha contra el cambio climático y el crecimiento sostenible.
El préstamo, denominado comercialmente Préstamo Sostenible, está dirigido a clientes particulares y a autónomos para financiar la compra de vehículos ecológicos, electrodomésticos de bajo consumo, maquinaria eficiente y reformas de viviendas o locales que conlleven ahorro de energía.
El crédito aplica un tipo de interés nominal del 4,75% fijo, no cobra comisión de apertura, tiene un plazo de amortización de hasta 8 años y financia hasta 60.000 euros.
Redacción