El descenso llegó en la primera jornada de negociación después de que los países de la OPEP no se pusieran de acuerdo sobre cómo afrontar la caída de los precios del crudo de las últimas semanas.
El barril del crudo del mar del Norte para entrega en enero se pagó ayer a 47,97 dólares, 5,16 dólares menos que al cierre de la jornada anterior en el International Exchange Futures (ICE).
El petróleo de referencia en Europa cedió terreno entre el temor de los operadores a una mayor caída de la demanda mundial de crudo y la impresión de que la OPEP no es capaz de adoptar ningún recorte en la producción tras el fracaso de la reunión de El Cairo.
El ministro argelino de Energía y presidente en ejercicio de la OPEP, Chakib Jelil, dijo hoy que el aplazamiento «es una estrategia» hasta la reunión que se celebrará en Orán (Argelia) el día 17.
El secretario general de la OPEP, el libio Abdalá El Badri, dijo que el cartel decidirá en diciembre una «acción mayor» de reducción de su oferta si la caída de los precios del crudo se mantiene.
El pasado 24 de octubre los miembros del cartel decidieron en Viena reducir la producción en 1,5 millones de barriles diarios para situarla en 27,3 millones, para afrontar la caída de los precios inducida por la crisis financiera y la reducción de la demanda.
Pero la medida no ha mostrado hasta ahora grandes efectos sobre el precio del crudo, que ha continuado cayendo.
El precio del Brent no ha dejado de cotizar a la baja desde el pasado julio, cuando marcó un máximo histórico al superar los 147 dólares, debido a la reducción de la demanda en Estados Unidos y otros grandes países consumidores a causa de la crisis económica.
El mercado de futuro de Londres se contagió del pesimismo que hay en la Bolsa londinense, que cayó un 5,19 por ciento y se dejó las ganancias con las que terminó la semana pasada.