«Tarea ésta que, al menos, hay que considerar de elevado riesgo por depender su éxito de una evolución favorable del mercado inmobiliario», indican los administradores en su informe, entregado al juez el pasado martes.
El informe recuerda que Martinsa solicitó un préstamo sindicado de 4.100 millones de euros para acometer la adquisición de las acciones de Fadesa, operación que califica de «gigantesco proyecto», y que, según indica, se realizó en un momento «en el que el mercado inmobiliario estaba llegando a un punto de inflexión en su crecimiento».
«Además, las dificultades financieras que ya se pusieron de manifiesto en el verano de 2007 y la influencia de las mismas en dicho mercado han producido el colapso financiero de la compañía», subraya el informe concursal.
De hecho, el referido crédito sindicato constituye el grueso de la deuda ordinaria neta de 4.361,7 millones de euros que registra la empresa que ha protagonizado el mayor concurso de acreedores. A su vez este endeudamiento es el grupo de la deuda total de 7.155 millones que actualmente soporta la compañía, frente a un activo valorado en 7.336,9 millones de euros.
Ventas de activos
El informe subraya además que, tras la declaración del concurso, la administración concursal ha pedido autorización al juez para desinvertir varios activos.
En concreto, han vendido el campo de golf de Señorío de Illescas por 3,15 millones de euros; la participación del grupo en el Hotel Med-Azur de Marruecos; ha hipotecado terrenos de Miño (A Coruña) en favor del Ayuntamiento de la localidad por 31,86 millones, y ha vendido su participación en el Gran Casino Real de Aranjuez por casi seis millones de euros. Todas las operaciones, salvo la primera, están pendientes de recibir el ‘visto bueno’ del juez concursal.
Además, ha vendido un conjunto de viviendas a Bancaja y Caixa Galicia por un total de 30,16 millones de euros, que redundaron en un beneficio para la empresa de 11,5 millones de euros.