Precisamente la apertura bajista de Wall Street hizo que los inversores europeos se decidiesen por las ventas. Al otro lado del Atlántico, las cifras semanales de paro, las más altas en 26 años, y la incertidumbre destada en torno al plan de rescate a las automovilísticas.
Asimismo, en el apartado macroeconómico el departamento del Comercio anunció que el déficit comercial ha empeorado en octubre más de lo previsto al aumentar un 1,1%, hasta 57.200 millones de dólares. Además, el departamento de Trabajo anunció que las peticiones iniciales de subsidio por desempleo subieron en 58.000 durante la semana que terminó el 6 de diciembre para totalizar 573.000.
Entre tanta noticia desfavorable, Procter&Gamble confirmó sus expectatvias de beneficio por acción para el segundo trimestre de su año fiscal, así como para el conjunto del ejercicio.
De vuelta a España, el índice consiguió salvarse de las pérdidas que marcaron el resto de las plazas europeas precisamente el día en que se celebraba la segunda la subasta del Fondo de Adquisición de Activos Financieros, con cargo al Tesoro Público que adjudicó 7.224 millones de euros, el 91,6% de los 7.885 millones disponibles, a 31 entidades financieras, para que incentiven la concesión del crédito a empresas y familias.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, mostró su confianza en que las previsiones que apuntan a una recesión global en 2009 sean erróneas, «como lo fueron al no pronosticar la crisis actual».
En cuanto a los grandes valores, también impulsaron las ganancias del índice. En concreto, Repsol subió un 1,12%, BBVA se apuntó un 0,70%, Telefónica avanzó un 0,31%, mientras Iberdrola ganó un 0,17% y Iberdrola sumó un 0,15%.
En cuanto al resto de valores, Acciona lideró las ganancias al avanzar un 5,30%. Inditex, por su parte, subió un 4,52% mientras Grifols sumó un 3,43%.
En el lado opuesto, Cintra fue el valor más castigado al ceder un 4,97%. Le siguieron Gamesa, que cayó un 2,71%, mientras Abengoa se dejó un 2,66%.