En contestación a Quintás agregó que «el ejecutivo de la Comunidad de Madrid no se dedica a decidir qué alianzas estratégicas se llevan a cabo, ni si se compran o venden participaciones en empresas, ni si se fusiona o no con otras entidades, o si se acomete la compra de bancos, por poner algunos ejemplos».
Además, indicó que al decidir modificar las normas aplicables a Caja Madrid está ejerciendo funciones de su competencia y que nada tienen que ver con la injerencia en la gestión de la entidad.
En este sentido, Beteta comentó que «la regulación consiste en legislar sobre los asuntos en los que la Comunidad tiene competencias en materia de cajas, en virtud de su Estatuto de Autonomía, y hacer que esta normativa se cumpla; e intervencionismo es participar en la gestión y la toma de decisiones diaria».
Beteta reiteró que el presidente de la CECA es una persona «que defiende exclusivamente los intereses de quienes le pagan, por no retractarse de las declaraciones que hizo el pasado martes en relación a la situación en Caja Madrid».
Quintás refrendó hoy los comentarios vertidos el pasado martes sobre Caja Madrid al insistir en la idea de que en la caja se da el «intervencionismo público más descarado» y no se retractó de sus críticas a la Comunidad de Madrid, como le pidió Beteta.