El impulso que está llevando a cabo el Museo Picasso de Barcelona sobre su colección permanente ha hecho posible que adquiera recientemente tres dibujos y dos libros ilustrados, procedentes de subastas norteamericanas y de galeristas españoles. El centro de arte potencia así sus obras, mediante una nueva política de adquisiciones que pretende situarlo como referente internacional en el 2012, en el estudio y la investigación del pintor malagueño y su obra.
El ayuntamiento ha invertido un millón de euros en la adquisición de los dibujos y los libros ilustrados, así como en la compra de la parte del fondo Sabartés que estaba en manos de Pilar Solano. Entre las obras incorporadas destaca «Bohemia madrileña (grupo de artistas)» (1901), adquirido en Sothebys por unos 254.000 euros, y que, según el director del museo, Josep Serra, «encaja perfectamente en el período cronológico en el que el museo es referencia absoluta» y constituye «una obra representativa de su estancia en Madrid en 1901, de la que el museo tiene escasos dibujos».
Cerca de 100.000 euros ha costado al consistorio el dibujo «Variación de Las Meninas», una dedicatoria al editor y estampador gráfico Louis Broder aprovechando la portadilla del libro de Jaume Sabartés Picasso: Les Ménines et la vie, una pieza que representa un buen complemento a la serie «Las Meninas» que Picasso cedió al museo de Barcelona.
Completa la tríada de dibujos una pequeña miniatura, «Miguel Utrillo y Santiago Rusiñol fumando en pipa» (1903), en la que ambos artistas aparecen caricaturizados como mujeres embarazadas. «La Célestine», de Fernando de Rojas, en edición de 1971 con 66 aguafuertes y aguatintas realizados por el malagueño en 1968 era uno de los títulos importantes que no figuraba en la colección de libros ilustrados del museo.
Josep Serra ha anunciado que en esta segunda fase el objetivo es que el Museo Picasso se convierta en «motor de generación de conocimiento e investigación en el eje de tres grandes líneas: la colección, la figura de Picasso y su recepción con el énfasis en la relación con Barcelona, y la génesis e historia del propio museo».
Con este motivo, el Museo Picasso ha creado un nuevo Archivo, que recogerá, conservará, organizará y difundirá todos aquellos fondos o colecciones de ámbito personal, patrimonial o institucional de interés para la historia del museo».
Picasso sin tópicos
El nuevo archivo del Picasso incorporará la parte del archivo personal de Jaume Sabartés, principal impulsor del museo, un fondo formado por documentación personal del que fuera amigo y secretario personal del pintor malagueño, correspondencia privada con Picasso o Dora Maar, mecanoscritos de Sabartés, tres de ellos inéditos, dos poemas eróticos manuscritos por Picasso, así como fotografías, siete libros dedicados por Picasso y dos por Miró y su biblioteca.
También se creará un nuevo centro de documentación que tiene como misión, entre otras actuaciones, impulsar un fondo oral de los protagonistas de la historia del museo, avanzó Serra. En su opinión, con todas estas propuestas se trata de «desligar a Picasso de algunos tópicos y mirarlo, en definitiva, desde el presente, que es la mejor manera de mantenerlo vivo», una acción con la que se pretende enmendar una realidad: «En las universidades catalanas no hay en estos momentos ninguna tesis doctoral sobre Picasso», ha lamentado.
En colaboración con la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) se realizará un estudio sobre los materiales y las técnicas en la obra de Picasso, «un terreno en el que está todo por explorar», ha asegurado el director.»Se puede saber el tiempo de secado de las pinturas y, por tanto, el tiempo que tardó Picasso en pintarlas y aquí caerán algunos mitos», ha advertido Serra.
Junto con la Universidad Autónoma (UAB) se pondrá en marcha el primer curso de posgrado de España dedicado a Picasso con el objetivo de «replantear las narrativas sobre su obra y la construcción de un nuevo corpus teórico». La segunda fase concluirá con la construcción del nuevo edificio anexo al museo -5,2 millones de inversión-, que a partir de 2011 acogerá la biblioteca, el archivo y el centro de documentación, así como los espacios educativos y científicos del centro.
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, dijo, por su parte, que el esfuerzo de «repensar Picasso y el Museo Picasso reforzará la capitalidad de Barcelona, especialmente en el ámbito cultural».