«Algunos bancos han tomado ya esa precaución. Si este viernes voy a Alemania a visitar dos bancos con los que tengo tratos, los aduaneros alemanes pueden decidir interrogarme», dijo el banquero al periódico.
Las prohibiciones afectan sobre todo a las visitas a Estados Unidos tras la detención en ese país de un destacado banquero privado que trabaja para UBS como parte de una investigación federal.
«Un banquero suizo que viaje a Estados Unidos se expone a ser interrogado. Yo me lo pensaré dos veces antes de ir a América», dijo al periódico el director de un banco privado que no prohíbe, sin embargo, a sus empleados viajar fuera del país.
Una fuente conocedora de la situación señaló por su parte que muchos banqueros privados no se atreven siquiera a viajar a la vecina Francia y no salen prácticamente de Ginebra.
Suiza aceptó este mes flexibilizar su actual legislación sobre el secreto bancario y adoptar los estándares internacionales de transparencia en el sector.