Ello significa, pues, que Nissan sigue teniendo un sobrante de más de 800 trabajadores, pese a que está agotando las medidas pactadas con los sindicatos para cubrir este excedente de manera no traumática.
El portavoz de Nissan, Alfredo Castaño, ha explicado hoy a Efe que la multinacional decidirá a partir de abril, una vez se cierre el plazo de adhesión al plan de bajas voluntarias, qué medidas toma para redimensionar la plantilla hasta los 2.800 trabajadores, la cifra mínima acordada con el comité.
Aunque Nissan no habla de presentar un nuevo ERE, pocas opciones le quedan ya para reducir la plantilla con el beneplácito de los trabajadores.
«A partir del 1 de abril reflexionaremos para ver qué medidas tomamos», ha declarado el director de Comunicación Corporativa de Nissan, que ha eludido confirmar si se presentará un nuevo expediente de extinción.
Según Castaño, la compañía ha cumplido con todos los compromisos acordados el pasado 25 de febrero con los sindicatos en la firma del plan industrial de las plantas de Barcelona.
Nissan ha asegurado dos nuevos productos a Barcelona y ha puesto en marcha un plan de prejubilaciones para los trabajadores mayores de 55 años, que percibirán el 90% de su sueldo bruto hasta la edad de retiro y, una vez jubilados, el 91% de la base reguladora.
También ha contratado a la empresa de recolocación Moa, que se ha comprometido a buscar un trabajo a todos los empleados que abandonen voluntariamente la compañía en el plazo máximo de dieciocho meses, y ha ampliado hasta el 31 de marzo el plan de bajas voluntarias, al que, de momento, se han apuntado o interesado por él unos 400 trabajadores.
Castaño ha calificado de «estupendo» este plan de bajas incentivadas, que ofrece a los empleados unas indemnizaciones de 60 días por año trabajado, con un mínimo y un máximo de 23.000 y 120.000 euros, según la antigüedad, y la garantía de recolocación.
La empresa está convencida de que en estos últimos días en que el plazo de inscripción estará abierto «mucha» más gente se inscribirá en el plan, por lo que ha decidido que el «espacio de empleo» habilitado en la factoría de Zona Franca, en la que se atiende a los interesados, permanezca abierto también este fin de semana.
Pese a todo, Castaño reconoce que será muy difícil que con el plan de bajas voluntarias se logre cubrir el excedente de más de 800 operarios que aún tiene la compañía.
El portavoz de Nissan ya ha advertido que los trabajadores que abandonen la empresa después del 31 de marzo lo harán en peores condiciones de las que se están ofreciendo actualmente, ya que en 2009 «no habrá dinero» para igualar las indemnizaciones.
«Y no es una amenaza, es la realidad», ha subrayado Castaño, que ha indicado que los empleados más susceptibles de abandonar la compañía serán aquellos que entraron después del 1 de junio de 2004.
Sindicatos y empresa se encuentran ahora reunidos para pactar las condiciones en que se llevarán a cabo las prejubilaciones.
Una vez que ambas partes alcancen un acuerdo, Nissan dará por finalizada la mesa de negociación del plan industrial tras haber cumplido «con todos los puntos» del mismo.