Por su parte, el secretario general de la CEOE, José María Lacasa, y el presidente de CEPYME, Jesús Bárcenas, le pidieron sumo cuidado y prudencia en sus declaraciones.
Estas consideraciones fueron realizadas tras la firma del Acuerdo Tripartito de Solución Extrajudicial de Conflictos laborales entre el ministro de Trabajo e Inmigración y los agentes sociales.
Corbacho advirtió al gobernador del Banco de España de que «no puede arrojar inseguridad sobre un sistema que es seguro ni jugar con la tranquilidad de ocho millones de pensionistas, tras lo que aseguró que los datos de la Seguridad Social apuntan a que acabará el año con superávit.
Fernández Ordóñez dijo ayer que el impacto de la crisis económica se ha dejado sentir en las cuentas de la Seguridad Social y que incluso el superávit «podría desaparecer durante este año, al tiempo que pidió reformas en el sistema pensiones.
Corbacho se preguntó «de dónde» ha sacado el gobernador del Banco de España dichos datos, al tiempo que recordó que el Fondo de Reserva de la Seguridad Social asciende a 57.000 millones de euros, la cifra más alta de su historia.
El ministro de Trabajo también argumentó que el actual sistema de pensiones es suficientemente «flexible» sobre la edad de jubilación en España y dijo que un posible retraso de ésta o el alargamiento de los años de cotización a la Seguridad Social debe debatirse en el marco del Pacto de Toledo.
Según Corbacho, la Comisión del Pacto de Toledo ha empezado sus trabajos en el Congreso y hay que esperar a las conclusiones que serán las que «marcarán el nuevo horizonte en el que enfocar el sistema de la Seguridad Social».
El ministro se mostró muy serio cuando aseguró que le gustaría que fuera «la última vez» que tuviera que discrepar con el gobernador del Banco de España y dijo tajantemente que desmiente «la mayor» al confirmar que «de ninguna de las maneras» se agotará el superávit de la Seguridad Social en 2009.
Recordó a Miguel Ángel Fernández Ordóñez que su misión es hacer un análisis del sistema financiero y aportar soluciones.
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, también se mostró muy crítico con las palabras del gobernador sobre futuras reformas en las pensiones y dijo que alargar la edad de la jubilación es «absolutamente innecesario».
Toxo resaltó que «no hay riesgo alguno de quiebra» ni en el sistema de pensiones ni en el sistema de la Seguridad Social y señaló que sólo «los apóstoles de las catástrofes perfectas están deseando que esto suceda».
No obstante, puntualizó que las posibles reformas en el sistema de pensiones deben debatirse en el marco del Pacto de Toledo donde CCOO sí propondrá reducir la edad de jubilación a los 60 años en sectores de riesgo como la construcción o el transporte.
Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, criticó el «exceso de locuacidad, de vanidad personal y de fanatismo ideológico» de Fernández Ordóñez y advirtió de que el presidente del Gobierno «debería decirle algo, ya que fue quién le apoyó en su nombramiento.
Méndez calificó de «medida desenfocada» la posibilidad de retrasar la edad de jubilación o de alargar el período de cotizaciones a la Seguridad Social durante la vida laboral y recordó que estos alarmismos se produjeron en 1995 cuando hubo una «ofensiva para privatizar las pensiones».
Las patronales CEOE y CEPYME también mostraron su preocupación por el alarmismo que ha generado el Banco de España y, en este sentido, el secretario general de CEOE, José Maria Lacasa, señaló que las pensiones son un tema «estratégico y social» que debe abordarse «con sumo cuidado».
El presidente de CEPYME, Jesús Bárcenas, concluyó que las consideraciones del gobernador de Banco de España transmiten «desconfianza» y «merman el consumo».