Este plan de acción, que fue trasladado este miércoles por el consejero delegado de Air Nostrum, Carlos Bertomeu, a los representantes de los trabajadores, «prevé tanto medidas de redimensionamiento de la compañía como acciones de reducción de costes, según ha argumentado la empresa.
En concreto, la aerolínea prevé recortar el servicio a bordo en clase turista, eliminar las rutas no rentables, disminuir su flota en 10 aviones, reducir un 18 % los vuelos, operar con una azafata en vez de dos en los aviones de 50 plazas y reducir proporcionalmente su plantilla.
La medida más relevante dentro del primer apartado será el abandono de las rutas no rentables y la reducción de un 18% en el número de vuelos.
Este recorte de rutas y número de vuelos, cuyo fin es según Air Nostrum «ajustar la producción a la demanda real, se pondrá en marcha entre mayo y octubre.
Implicará, según la empresa, una disminución de la flota en diez aviones y una reducción de la actual plantilla vinculada a dichas aeronaves, tanto en el caso del área técnica como de la operativa así como en la parte proporcional del personal de oficinas y servicios generales.
Otra herramienta dentro de este capítulo será la venta de repuestos asociada a la flota saliente, indica la empresa.
Dentro del catálogo de las acciones dirigidas a la reducción de costes se ha previsto la disminución del servicio a bordo que la compañía brinda este miércoles en su clase turista.
Como consecuencia directa de esta acción Air Nostrum suprimirá una de las dos auxiliares de vuelo que hasta el momento atendían las cabinas de pasajeros en las aeronaves de 50 pasajeros (la normativa sólo exige la programación de un auxiliar de vuelo en este tipo de aviones).
El ahorro previsto con la aplicación de ambas decisiones, según apunta la compañía de aerolíneas, está cifrado en más de 11 millones de euros.
Además, la empresa abrirá un periodo de negociación con los representantes de los trabajadores con el objetivo de analizar otro paquete de medidas, como reducciones salariales y flexibilización de las condiciones retributivas, que permitan reducir los costes de la operación una vez ya redimensionada para, así, garantizar el futuro.
Según argumentó Air Nostrum, la reducción de la producción en un 18% y la salida de 10 aviones de la flota de Air Nostrum, afectaría directamente a un total de 403 trabajadores -distribuidos de manera proporcional en todos los colectivos-.
En paralelo, 186 empleados más de las áreas de Tripulantes de Cabina de Pasajeros (TCP,s), operaciones y handling podrían verse igualmente afectados por la decisión de optimización de costes en la operación reducida que se considera viable.
En el primer trimestre del 2009 los pasajeros de Air Nostrum se han reducido un 9% respecto al año anterior y que los usuarios de las denominadas «tarifas de negocios» han caído un 30% en el mismo período, lo que ha generado una reducción de los ingresos totales de la aerolínea de un 16%, según los datos aportados por la compañía.
«Nuestras previsiones para 2009 se han visto superadas y por ello ya se habían acometido medidas preventivas de contención de gasto, pero los datos de febrero y especialmente los de marzo confirmaron que el escenario era infinitamente peor al esperado, destacó Bertomeu.
El consejero delegado de Air Nostrum apuntó a los representantes sindicales que «desde una posición financiera absolutamente sólida y solvente, la empresa está actuando «para garantizar el futuro de esta empresa».
«En los próximos años nada será igual, por eso hemos desarrollado un amplio plan de acción para adaptarnos cuanto antes al nuevo escenario de mercado, y asegurar nuestro futuro, concluyó.