Asimismo, el portavoz de la empresa indicó que la caída de la llegada de turistas internacionales a España en el primer trimestre, un 16,3 %, también está afectando a la compañía aérea, ya que se viaja menos, y aunque «tradicionalmente» los primeros tres meses del año son de baja ocupación para Iberia, «este se está mostrando bastante negativo».
El índice de ocupación de Iberia ha descendido un 2,9 % en el primer trimestre del año, al pasar del 79,4 % entre enero y marzo del 2008 al 76,4 % en el 2009, con una mayor caída en el principal negocio de la compañía, los vuelos de largo radio, que bajaron 4,3 puntos.
En cuanto a otras actuaciones previstas por la compañía se encuentra la ya anunciada por el propio presidente de Iberia, Fernando Conte, en la rueda de prensa de presentación de resultados anuales del 27 de febrero, de reducir la oferta para el 2009, que en un principio estaba previsto que bajase un 1,7%, hasta un 4%.
Dividendos
La aerolínea explicó que las actuales circunstancias, «excepcionalmente difíciles, podrían incluso provocar que la compañía cerrara en ‘números rojos’ el presente ejercicio, durante el cual también se debería concretar el proceso de fusión de Iberia con British Airways.
«Si se mantienen a lo largo del año las actuales circunstancias, excepcionalmente difíciles, es improbable que la compañía obtenga un resultado positivo en el ejercicio 2009, recalcó el director financiero y de Estrategia Corporativa de Iberia, Enrique Dupuy, en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
No obstante, Dupuy señaló que la compañía tiene una «visibilidad reducida» para estimar los resultados del conjunto del ejercicio, ya que dependerán de la evolución del entorno macroeconómico y de otras variables como el precio del combustible o el tipo de cambio del dólar.
El directivo consideró que en este momento los ingresos de la aerolínea se están viendo afectados por factores como la «debilidad del mercado de origen España, así como de la mayoría de los mercados internacionales, la caída del tráfico de negocios y las presiones sobre los precios» y recordó que la crisis económica global «está afectando de forma muy significativa al negocio de transporte aéreo en todo el mundo».
Ante esta situación, el consejo de administración, que se reunió hoy, también analizó las líneas maestras de un plan de contingencia que se materializará con «medidas concretas en las próximas semanas».
Eres
En referencia al plan de contingencia, fuentes de la aerolínea informaron que Iberia estudia medidas como un nuevo recorte de la capacidad y de la flota, así como ajustes en su plantilla que pasarían por bajas incentivadas, EREs temporales en determinados colectivos o prejubilaciones.
Así, la compañía está estudiando un nuevo recorte de su capacidad, fijado en un 4% para 2009 frente al 1,7% recogido en su Plan Director a principios de año, «todavía por concretar».
Además, retirará cinco aviones de su flota en ‘wet lease‘ -régimen de alquiler con tripulación-, con Gestair.
En lo que se refiere a la situación de la plantilla, como ya adelantara el presidente de Iberia, Fernando Conte, durante la presentación de sus resultados anuales, la compañía quiere profundizar en la reestructuración de personal, para lo que acelerará su plan de prejubilaciones y realizará alguna actuación temporal.
En cualquier caso, fuentes de la aerolínea insistieron en que se tratará de ajustes vinculados a la reducción de tiempo de trabajo, bajas incentivadas de uno o dos años, adelantos de prejubilaciones o Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) temporales en algunas áreas.
De esta forma, la compañía no descarta que si las condiciones económicas mejoran y se recupera la demanda de pasajeros se pueda reincorporar posteriormente a personal.