El conocido pato hizo su debut el 9 de junio de 1934 como secundario en la historia «The Wise Little Hen», en la que Donald ya mostró su carácter arisco al dar la espalda a una gallina que necesitaba ayuda para plantar y recolectar grano.
Su singularidad, marcada por una voz solo comprensible para el resto de los personajes Disney, le llevó a protagonizar su primer corto de animación en 1937, «Don Donald», momento en el que también se presentó a la audiencia la que sería la eterna novia del quejoso pato, Donna, que pasaría a denominarse Daisy más adelante.
El éxito de Donald fue tal que en la década de los 40 este ave de pluma blanca y traje azul de primera comunión ya había encabezado más historias que el propio Mickey Mouse. Una trayectoria que le deparó cerca de 130 papeles protagonistas y decenas de apariciones en producciones del ratón más famoso del mundo y otros compañeros Disney como Pluto o Goofy.
Un currículum que le supuso una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood e imponer su membranosa pata en cemento a la entrada del prestigioso Teatro Chino de la meca del cine, un honor reservado a pocas figuras de la gran pantalla.
Donald comenzó a traspasar las fronteras anglófonas y se convirtió en un fenómeno en el mundo hispano en 1942 con «Saludos amigos» y «The Three Caballeros» (1944), dos producciones que compaginaban animación con actuaciones reales y que presentó Disney en América Latina.
Ambas citas, en las que el pato aparecía con el loro Joe Carioca, fueron candidatas al Óscar. La estatuilla le llegaría al tratar la II Guerra Mundial en «Der Fuehrer’s Face» (1942), donde Donald soñaba que vivía bajo el régimen nazi y finalmente se despertaba bajo la Estatua de la Libertad aliviado por ser estadounidense.
Situaciones cómicas
Su terquedad llevaría al pato a vivir situaciones comprometidas que solucionaría en la mayor parte de los casos tras aplacar su lado más impulsivo.
Los estudios Disney le definieron como un pato cuya «segunda o tercera intención es la buena pero cuando éstas emergen él ya camina en la dirección equivocada».
«No importa cuánta humillación el mundo le depare, Donald la recibirá y volverá a por más. Es un perdedor que no abandona. Él caerá luchando», se afirma en el portal de internet de los estudios Disney. Títulos como «Donald’s Crime» (1945) destacan ese lado oscuro del pato, dispuesto a robar los ahorros de sus sobrinos para pagar una cita con Daisy, si bien la trama termina con el arrepentimiento del ánade.
La buena acogida de Donald se plasmaría en la creación de un cómic propio en 1938 y más adelante justificaría el nacimiento de otros personajes de la familia del palmípedo. Daisy tendría tres sobrinas, Abril, Mayo y Junio, al igual que Donald sería el tío de Huey, Dewey y Louie, que en español recibirían diferentes nombres en función del país (Hugo, Paco y Luis; Juanito, Jaimito y Jorgito; Huguito, Dieguito y Luisito).
Una estrella de Disney
En ese universo de caricaturas debutaría a finales de los 40 otro clásico pato del clan Donald, Scrooge McDuck o Uncle Scrooge, el Tío Rico o Tío Gilito (Rico McPato) en español, un avaro pariente de Donald inspirado en la novela de Charles Dickens «A Christmas Carol».
La última película de Donald fue «A Goofy Movie» y se estrenó en 1995, once años después del 50 aniversario del pato, que entonces fue nombrado marine honorario del Ejército de EEUU y llegó a pasar revista a las tropas de El Toro Marine Corps Base en California.
Con motivo de los 75 años del pato, Disney puso en marcha un concurso internacional para que los seguidores de este ave plasmen en un dibujo el espíritu que mejor representa al carismático palmípedo.