«Su discurso fue brillante y astutamente sensible. Sus palabras navegaron entre campos minados con artefactos culturales explosivos y trampas político-religiosas. Consiguió esquivar los peligros sin evitar los temas».
«Lo que las gentes de Oriente Medio quieren saber es si el presidente de los Estados Unidos continuará operando en secreto con regímenes despóticos. Decenas de años de apoyo a los tiranos locales y el apoyo incondicional a Israel han contribuido a inflar el odio Islamista. Es algo que al Presidente le dará mucho que pensar».