Los representantes de las centrales sindicales CIG, UGT y CCOO y de los empresarios del sector metalúrgico en Pontevedra rompieron a última hora de ayer las negociaciones del convenio colectivo, después de mantener una reunión ininterrumpida de 34 horas.
Desde hoy secundarán esta huelga, además de los trabajadores de las empresas que se regían por el convenio del sector, los de las empresas con convenio propio, unas 2.000 más, entre las que se encuentra el centro PSA Peugeot Citroën de Vigo.