La superficie transmitida en dichas transacciones fue de 8,7 millones de metros cuadrados, el 41,6% menos que un año antes, y su valor total fue de 2.571,1 millones de euros, lo que significa un descenso del 39,4%.
Por Comunidades Autónomas, el 17,4% de la superficie transmitida le corresponde a Madrid (1,5 millones de m2), el 16,5% a Andalucía (1,4 millones de m2) y el 13,7% a Cataluña (1,2 millones de m2).
Madrid es asimismo la comunidad en la que las operaciones de suelo alcanzaron un valor más elevado, 709,6 millones, seguida de Andalucía (418,5 millones de euros) y Cataluña (304,3 millones de euros).
Por lo que respecta a los precios, el suelo es más caro en los municipios de más de 50.000 habitantes, donde el metro cuadrado se paga a 650,4 euros, el 0,5% menos que un año antes.
Por el contrario, el metro cuadrado de suelo es más barato en los municipios de menos de 1.000 habitantes, donde cuesta 76,5 euros, el 10,8% menos que hace un año.
Entre ambos extremos se sitúa el suelo de los municipios de entre 1.000 y 5.000 habitantes (122,6 euros/m2, el 7% menos), los de entre 5.000 y 10.000 (200,7 euros/m2, el 0,3% menos), y los de entre 10.000 y 50.000 (274,8 euros/m2, el 9,1% menos).
El metro cuadrado de suelo más caro está en los municipios de más de 50.000 habitantes de las provincias de Barcelona (976,7 euros), Álava (947,7 euros), Madrid (927,1 euros) y Valencia (923,8 euros), mientras que el más barato que se puede encontrar en las localidades de este tamaño está en Jaén (297,8 euros), Zamora (429,3 euros) y Ourense (430 euros).