«Hubo muchas brechas para evitar que se produjera esta crisis -indicó Obama- y seguramente la Fed lo hizo mejor que otros reguladores, pero aun así, no hizo todo lo posible para prevenir que ocurriera».
Obama se negó a avanzar si el próximo mes de enero renovará el mandato a Ben Bernanke.
Sí defendió la reforma financiera que quiere poner en marcha, y que ha recibido algunas críticas de la oposición republicana porque fortalece los poderes de control y supervisión con que cuenta ahora la Reserva Federal.
«Lo importante no es si la Fed refuerza o no sus poderes, sino si es capaz de hacer más para evitar los riesgos sistémicos que nos pueden conducir a otra crisis», afirmó.