Con esta medida extraordinaria, el BCE quiere facilitar a los bancos comerciales que concedan créditos a largo plazo y de este modo apoyar la reactivación de la economía de los países del euro, que atraviesa la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.
La operación se ejecutará mañana y vencerá el 1 de julio de 2010, cuando los bancos comerciales de la zona del euro tendrán que devolver el efectivo al BCE.
Los mercados financieros habían esperado con expectación esta operación de refinanciación, ya que ofrecía unas condiciones muy favorables para financiarse: un tipo de interés de tan sólo el 1 por ciento y durante un período de un año.
El resultado de la subasta se ha situado dentro de los pronósticos de los analistas.
Commerzbank consideró que en el mercado hay más liquidez de la que los bancos necesitan, por lo que los tipos de interés interbancarios bajarán notablemente los próximos meses.
Los mercados financieros prevén que el BCE no va a reducir más los tipos de interés y que mantendrá su tasa rectora en el 1 por ciento en lo que queda del año y, al menos, los primeros meses de 2010, pero que los subirá a mediados del próximo ejercicio.
En este sentido, el analista de Commerzbank Michael Schubert dijo a EFE que «como la necesidad de liquidez está cubierta hasta julio del próximo año, el BCE no puede subir los tipos de interés antes».
El BCE anunció a comienzos de mayo que iba iniciar operaciones de financiación a plazo más largo, con vencimiento a un año.
Hasta ahora, el vencimiento máximo de las operaciones de refinanciación a largo plazo del BCE era seis meses.
Esta nueva medida apoyará especialmente a España debido a las características de su sistema hipotecario, ya que el tipo de interés de la mayor parte de las hipotecas se fija en relación al Euribor a doce meses, tasa a la que los bancos se prestan dinero entre ellos durante este período.
El 91 por ciento de los créditos hipotecarios a los hogares se fija en España en referencia al Euribor a doce meses y en Finlandia, incluso más, el 96 por ciento, según cifras del BCE.
El Euribor a doce meses marcó hoy un nuevo mínimo histórico diario en el 1,57 por ciento, debido a los efectos de esta primera inyección de liquidez durante un año y adjudicación plena.
El Euribor a doce meses, que lleva once jornadas consecutivas a la baja, se dispone a acabar el mes de junio con un nuevo mínimo histórico mensual, frente al 1,644 por ciento con el que cerró mayo.
Por tanto, esta nueva inyección de liquidez contribuirá a que baje el Euribor a doce meses y a reducir los tipos de interés de las hipotecas de países como España.
El diario «Financial Times» consideró hoy en un editorial que «la decisión de ofrecer fondos ilimitados durante un año es la culminación de los esfuerzos del BCE de inyectar liquidez en el sistema bancario».
«La Reserva Federal estadounidense (Fed) y el Banco de Inglaterra ganaron titulares con sus experimentos de expansión cuantitativa, pero los métodos menos impresionantes del BCE han producido resultados respetables», según el rotativo.
Los tipos de interés a corto plazo tienden hacia el mínimo establecido por la facilidad de depósito del BCE, la tasa a la que remunera el dinero a los bancos a un día y que está actualmente en el 0,25 por ciento.
Desde octubre de 2008, el BCE ha recortado los tipos de interés en 3,25 puntos porcentuales, hasta el 1 por ciento, un nivel históricamente bajo, y comprará a partir de julio bonos garantizados (cédulas hipotecarias y territoriales) por un monto de 60.000 millones de euros (84.600 millones de dólares).
La inyección de liquidez con vencimiento a un año ha reducido la demanda de efectivo a corto plazo, como se vio ayer en la subasta semanal del BCE, que es su operación de refinanciación principal.