La aplicación de la CNE facilitará a los consumidores el acceso a las distintas ofertas de las nuevas comercializadoras tanto de último recurso como del mercado libre, y se suma a otras iniciativas del regulador en este ámbito, que van desde la cooperación con organizaciones de consumidores a la puesta en marcha de campañas periódicas de comunicación.
Desde el regulador se considera que, pese a lo incipiente del proceso, ya empieza a haber algunas ofertas interesantes, aunque todavía las empresas no disponen del margen de otros países con más recorrido en la liberalización, como Reino Unido.
La CNE espera que durante el proceso se potencien y agilicen las vías de reclamación, y recuerda que los clientes que decidan abandonar la tarifa regulada para salir al mercado podrán volver a la TUR transcurrido un año.
A los clientes de más de 10 kW se les aplicará a partir de julio un recargo trimestral del 5% durante nueve meses para incentivarles a buscar una comercializadora en el mercado, y tras ese periodo, al final del cual la luz se les habrá encarecido un 20%, aún se les suministrará electricidad durante seis meses pese a no haber salido de la TUR.
Entre los clientes de este grupo que pueden tener menos flexibilidad para pasar a una comercializadora en el mercado libre y que, por ello, podrían quedar sometidos a más recargos, figuran algunas administraciones públicas como los ayuntamientos, que se encuentran sometidos a los calendarios impuestos por la legislación estatal sobre contratación.