Unos 900.000 pensionistas, según las mismas fuentes, ya han recibido la comunicación.
Podrán beneficiarse del bono social los pensionistas mayores de 60 años por jubilación, viudedad o incapacidad permanente que perciban cuantías mínimas, con o sin cónyuge a cargo y también los beneficiarios del extinguido Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) y los de pensiones no contributivas.
Para tener derecho a la congelación de tarifa, que surtirá efecto a partir del primer día del mes siguiente a la recepción de las acreditaciones, los beneficiarios deben presentar sus solicitudes a las compañías comercializadoras de la energía eléctrica, personalmente o mediante el envío de fax, correo electrónico o postal.
También deberán aportar, entre otros documentos, el certificado expedido por la Seguridad Social.
El Consejo de Ministros aprobó el pasado 30 de abril un Real Decreto-Ley por el que el Gobierno solucionaba el problema del déficit tarifario -la diferencia que se produce cuando los ingresos del sistema eléctrico no cubren los costes- acumulado desde 2000, en el cual se incluyó la tarifa reducida o bono social.
Según esta tarifa, el recibo de la luz se congelará hasta 2012 para los consumidores con una potencia contratada de hasta 3 kilovatios (KW) en su primera vivienda, para las familias numerosas, las que tengan a todos los miembros en paro y quienes perciban pensiones mínimas, lo que afectará a unos 5 millones de hogares.
El Real Decreto de 30 de abril se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el 7 de mayo.