Metrovacesa buscará además sinergias dentro de las actividades de la propia empresa y redefinirá sus distintos procesos, para evitar «duplicidades en el negocio».
Así lo anunció hoy el presidente de la compañía, Vitalino Nafría, en su intervención ante la junta general de accionistas, la primera del grupo tras quedar controlado por un grupo de seis entidades financieras que ejecutaron la deuda de la familia Sanahuja, su anterior accionista de control.
Metrovacesa prevé traducir estas líneas básicas en un plan estratégico que cuente con objetivos numéricos y horizontes temporales, que podría estar listo para después del verano, según indicaron a Europa Press en fuentes de la empresa.
El principal objetivo del nuevo modelo de negocio de la inmobiliaria es «revertir» su actual situación. A cierre del primer trimestre del año, Metrovacesa registró una pérdida neta de 90,2 millones de euros, fundamentalmente por provisiones y pérdidas registradas en ventas de activos.
Su deuda financiera neta ascendía a 6.130 millones de euros a cierre de marzo, cuando la compañía tenía en cartera once proyectos (cinco complejos de oficinas, dos centros comerciales, dos hoteles y dos aparcamientos).
Durante su intervención en la junta, Nafría garantizó que Metrovacesa cuenta con las bases necesarias para afrontar la «difícil» coyuntura actual. «El futuro viene marcado por la austeridad y por una gestión más ajustada. Sólo así responderemos a las necesidades del mercado», aseguró.
Para el nuevo presidente, entre las «fortalezas» de la inmobiliaria figuran «una singular estructura de negocio sustentado en un importante negocio patrimonialista», el nuevo accionariado, «márgenes de ingresos superiores a la media del mercado», una «prestigiosa» marca y un «excelente equipo profesional».
Sin intervenciones
La asamblea de Metrovacesa, en la que no intervino ningún accionista, aprobó, en el marco de la referida política de contención de costes, el punto del orden del día referido a la remuneración del consejo.
Así, se aprobó reducir a un millón de euros el límite máximo a percibir por los once miembros del consejo de administración, informó hoy la compañía en un comunicado.
El máximo órgano de gestión de la compañía percibió 3,74 millones de euros en 2008, año en el que Metrovacesa perdió más de 700 millones de euros, con lo que la medida aprobada supone una bajada del suelo del 73 por ciento.