Este nivel históricamente bajo resulta «apropiado» a la vista de los últimos indicadores de crecimiento e inflación, recalcó el economista francés.
Así, explicó que la economía del euro seguirá débil hasta final del año, pero las caídas no serán tan acusadas como en el primer trimestre (cuando el PIB bajó el 2,5% en relación a los últimos tres meses de 2008 y el 4,8% si se compara con un año antes).
En 2010 empezará la recuperación y el PIB volverá a tasas positivas a mitad de ese ejercicio, según sus pronósticos.
Sin embargo, Trichet advirtió de que en los próximos meses continuará empeorando la situación del mercado laboral -en mayo, la tasa de desempleo en el área de la moneda única alcanzó su máximo en diez años, al llegar al 9,5% de la población activa-.
Respecto a los tipos de interés, el presidente de la autoridad monetaria consideró que las últimas rebajas todavía no se han trasladado en su totalidad a los mercados financieros y subrayó que no están descartados nuevos recortes.
Satisfechos con las medidas de liquidez
«No hemos decidido todavía que este nivel (el 1%) es el más bajo al que llegaremos», reseñó Trichet, quien hizo hincapié en que la institución con sede en Fráncfort continúa vigilante para garantizar la estabilidad de precios y apoyar la recuperación económica y la restauración de la confianza en los mercados.
El presidente del BCE también defendió las iniciativas adoptadas hasta la fecha por el organismo para impulsar la liquidez -«estamos satisfechos con el resultado», aseguró- y apeló a las entidades bancarias para que también «asuman su responsabilidad» y contribuyan a la normalización del flujo de crédito.
Respecto al programa de compra de bonos garantizados anunciado por el Banco hace dos meses, Trichet reiteró que la inversión prevista es de 60.000 millones de euros y que se adquirirán títulos tanto en el mercado primario como secundario, con un límite mínimo por emisión de 500 millones de euros (aunque habrá excepciones).
Las operaciones se concentrarán en el área del euro, pero en algunos casos podrán admitirse bonos garantizados con activos de fuera del Eurosistema, precisó.