El comité de empresa de la planta de Opel España se reunió este miércoles en la fábrica para valorar, a petición de UGT, una convocatoria de manifestación contra el plan propuesto el pasado mes de julio por la nueva dueña de Opel. «Tras una larga mañana de debate hemos acordado convocar una manifestación conjunta y hacemos un llamamiento a la participación porque es mucho lo que está en juego en Aragón y España», señaló.
La manifestación partirá el sábado a las 12.00 horas de la plaza de San Miguel de la capital aragonesa y finalizará, a falta de confirmación, en la Plaza de Paraíso.
«El motivo es manifestar contundentemente que los trabajadores de Opel, de las auxiliares y toda la ciudadanía de Aragón está en contra del plan industrial de Magna», aseveró.
En este sentido, Arceiz incidió en que los trabajadores «no vamos a aceptar ningún plan de ahorro si la nueva propietaria se empeña en mantener este plan» y, de hecho, avanzó que el comité se reunirá el lunes, 21 de septiembre, con los directivos de Magna «y si no acceden a negociar un plan nuevo se pondrá en marcha un calendario de huelga».
GM anunció la semana pasada la venta del 55% de su filial alemana Opel al fabricante canadiense de componentes para vehículos Magna. De esta forma, GM mantendría el 35% de las acciones y el 10% restante correspondería a los trabajadores.
El plan de Magna y de su socio ruso Sberbank contempla la eliminación de 10.500 empleos en Europa, de los que alrededor de 1.700 despidos corresponderían a la planta de Figueruelas (Zaragoza), teniendo en cuenta que la producción asignada para la planta aragonesa se reduciría a 320.000 unidades.
Reticencias en España
La secretaria general de Industria, Teresa Santero, afirmó en rueda de prensa tras una reunión con representantes del Gobierno de Aragón y de los sindicatos UGT y CCOO, que condiciona el apoyo financiero de España al plan del nuevo accionista mayoritario a que la decisión «sea razonable».
«Creemos que el traslado de la planta de Figueruelas a Eisenach no tiene sentido. Los Gobiernos implicados reclamaron en la reunión de Berlín mayor información sobre los planes de Magna», explicó la secretaria de Industria. «La decisión que se tome debe ser razonable», sentenció.
Santero emplazó a «esperar a saber concretamente qué propone Magna» para determinar con cuánto dinero apoya España la operación del consorcio ruso-canadiense, y aseguró que en caso de que la propuesta no satisfaga al Gobierno, negociarán con la compañía y reclamarán a la UE.
La secretaria de Industria adelantó que Magna prevé presentar a finales de septiembre un plan concreto de reestructuración de Opel, y recordó que General Motors y la compañía canadiense «contemplan» un informe de un tercero sobre la viabilidad de su propuesta.
En cuanto a la manifestación convocada por los sindicatos el próximo sábado en Zaragoza, Santero valoró la iniciativa como «un mensaje de los trabajadores y la población de Aragón» a Magna para «expresar su descontento», y confió en que el nuevo dueño de Opel «tome note» y conteste con «más información».
Por su parte, el consejero de Industria, Comercio y Turismo de Aragón, Arturo Aliaga, eludió confirmar su asistencia a la manifestación, aunque mostró su apoyo a los trabajadores. «El sábado veremos si participamos», se limitó a comentar Aliaga.