El Gobierno prevé facilitar el acceso a esta píldora a todas las mujeres en edad fértil que la necesiten, recordando que sólo debe utilizarse en aquellas situaciones de urgencia que lo requieran, principalmente cuando fallen otros métodos anticonceptivos o en relaciones sexuales no protegidas.
A este respecto, el ministerio recuerda que «no debe emplearse como un método anticonceptivo habitual», pues existen otros métodos como el preservativo que, además, previenen enfermedades de transmisión sexual como, por ejemplo, el VIH-sida.
Para un correcto uso de la anticoncepción hormonal de urgencia, Sanidad ha elaborado distintos materiales informativos que los farmacéuticos entregarán a las usuarias de la píldora en cada dispensación, en colaboración con el Colegio de Farmacéuticos y distintas sociedades científicas.
Por un lado, ofrecerán información de utilización para las usuarias con recomendaciones sobre el uso de la píldora, modo de actuación del medicamento y posibles efectos secundarios. Del mismo modo, también se informará de otros métodos anticonceptivos de uso regular (con información sobre métodos de barrera, hormonales) y sobre la prevención de infecciones de transmisión sexual.
Según informa Sanidad en un comunicado, como es habitual en los casos en los que un medicamento cambia su estatus, habrá un periodo lógico de convivencia de envases entre los antiguos (todavía con la frase con receta médica en el cartonaje) y los nuevos (con la frase medicamento no sujeto a prescripción médica) que vayan produciendo los laboratorios fabricantes y que irán sustituyendo a los antiguos hasta la renovación total del stock.
Esto no impide la dispensación de la píldora sin necesidad de prescripción médica, pues la autorización de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ya está dada y los farmacéuticos y el resto de agentes del sector (fabricantes y mayoristas) conocen esta circunstancia.
«Garantizar la equidad en el acceso»
Trinidad Jiménez, que ha inaugurado el nuevo Hospital Universitario de la Ciudad Autónoma de Ceuta, ha hablado sobre la píldora y ha manifestado
que «era importante facilitar el acceso de todas las mujeres» a este medicamento «con independencia del lugar donde vivieran, ya que no en todas las autonomías podían adquirirse estas píldoras sin receta y había dificultades para que un profesional, los fines de semana», pudiera recetarla.
Según la ministra de Sanidad y Política Social, esa circunstancia ponía «a la mujer que quisiera tomarla en una situación de riesgo, ya que es fundamental que se consuma dentro de las primeras 72 horas», por lo que ha afirmado que con la nueva medida el Gobierno ha «querido garantizar fundamentalmente la equidad en el acceso».
También ha recalcado que la píldora «sólo debe ser utilizada en condiciones de urgencia, de emergencia», pues «en lo que nosotros queremos insistir es, en materia de educación sexual, en otros métodos que se deben utilizar de manera alternativa». En este sentido, Jiménez ha incidido en que la píldora poscoital «no es un método al uso y no evita enfermedades de transmisión sexual».
Embarazos no deseados
Según datos del 2007, en España se produjeron más de 10.600 embarazos en chicas menores de 18 años y de las 112.138 interrupciones voluntarias del embarazo realizadas ese año, 6.273 se produjeron en menores de 18 años (500 en menores de 15 años).
Además, con esta iniciativa España se equipara a la mayoría de los países de su entorno, entre ellos Francia, Gran Bretaña, Holanda, Bélgica, Grecia, Portugal, Suecia y Suiza, entre otros (la anticoncepción hormonal de urgencia es de libre dispensación en 15 países europeos).