El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González-Pons, cree que la investigación del caso pierde credibilidad porque «se está forzando la suerte procesal» con actuaciones como la grabación de conversaciones entre imputados y sus abogados, en una «quiebra descomunal» del principio de defensa.
Tras afirmar: «Vamos a dejar que el morlaco salga entero», el dirigente del PP ha indicado que en el procedimiento judicial se están filtrando informaciones «de una manera medida, premeditada, calculada», con la intención de desviar la atención y de hacer «daño» al PP.
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, respecto a los comentarios del presidente fundador del partido, Manuel Fraga, sobre la situación en la Comunidad Valenciana, ha dicho: «Nosotros estamos actuando como tenemos que actuar».
De Cospedal lo ha expresado así al ser preguntada sobre el comentario de Fraga diciendo que «no da la sensación de que vaya muy bien» la situación del PP valenciano.
Costa y Arenas
Otro de los que aparecen en el sumario es el secretario general del PP de Valencia, Ricardo Costa, quien ha negado que la trama haya tenido que ver en la compraventa de su antiguo y su nuevo coche.
Ha reiterado que el turismo de lujo con el que sufrió un accidente en mayo lo pagó con el dinero procedente de la venta del viejo y con un préstamo personal.
El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, ha reiterado que no tiene «absolutamente nada que ver» con el caso y ha advertido de que llevará a los tribunales a quienes le acusen de ello.
Arenas ha reiterado que no tiene nada que ver con la información de que en una misiva que en el 2003 Álvaro Pérez, «El Bigotes», envió al entonces secretario general del PP, Mariano Rajoy, reclamando el pago de «dinero B» por actos en Galicia, comunicaba también que Arenas estaba al tanto.