Costa ha defendido que «nunca tomó la decisión de trabajar» con Orange Market, y que la dirección nacional del partido nunca ha pedido al PPCV que dejara de trabajar con esa empresa implicada en el ‘caso Gürtel’. Además, Costa se ha lamentado que desde la Dirección Nacional del PP no le hayan llamado, pero que espera que desde Génova se «defienda su imagen, honor y honradez».
Durante la comparecencia, el secretario general de PPCV ha explicado en relación con Orange Market que él «no ha hecho ningún contrato público porque no es una función que me compete» y que además como secretario general «nunca he tenido la responsabilidad de coordinar las campañas autonómicas ni municipales, ni de organizarlas».
Costa ha defendido que ha actuado «correctamente cumpliendo con mis funciones de secretario general» y pide que «le trasladen a Rajoy las razones por las cuales no he presentado mi dimisión: Tengo la conciencia tranquila, he seguido siempre los estatutos del partido y he antepuesto mi compromiso hacia Camps y Rajoy».
Costa cree que algunos «quieren convertirme en chivo expiatorio o en cabeza de turco» y está seguro de que si presentara su dimisión «diría a los ciudadanos que el partido o su secretario general ha actuado de manera incorrecta». «Llevo más de 20 años en el PP y soy consciente de que muchos militantes no se siente representados» tras las conversaciones divulgadas. Por ello, «pido disculpas a aquellos que puedan sentirse defraudados». Costa ha añadido que se «reserva emprender acciones legales por varios motivos».
El coche, el reloj y los trajes
El primero, «según alguna publicación, a raiz del levantamiento del sumario por el TSJM» sobre la compra de su vehículo, Costa afirma que lo compró de forma personal y que «lo he pagado íntegramente, tal y como acreditan las facturas que he mandado al partido». De hecho, el secretario general del PP valenciano afirma que una de las conversaciones entre Álvaro Pérez, conocido como ‘El bigotes’ y Crespo, «dicen no haber interferido en la compra del vehículo».
En segundo lugar, «el reloj de acero de 20.000 euros, a pesar de que en las conversaciones se dijo que era un regalo personal» de un compañero del partido, Luis Díaz Alperi, que «éste mismo valoró en 6.000 euros». Costa defiende que fue un regalo de un compañero de partido de 15 años y que le hizo el regalo «cuando no tenía responsabilidades como alcalde, en otras circusntancias no lo habría aceptado».
Y tercero, Ricardo Costa afirma que «he pagado mis trajes», que «nadie le ha regalado» ninguno y que ha aportado las facturas a la dirección del PP. Y que además, este caso fue archivado por el TSJCV».
«Mi único patrimonio es mi honradez»
El popular afirma que su «único patrimonio es mi honradez por haber trabajado en este proyecto durante los últimos 20 años» y que «no se puede poner en tela de juicio a ningún dirigente».
Asimismo, pide que «si la Dirección Nacional del PP tiene la mínima duda de mi gestión u honradez que abran una investigación interna sobre mi persona» y añade, que pone «a disposición del PP» toda la documentación y declaraciones de renta necesarias.
Sobre la posibilidad de que esta tarde se le cese, Costa asegura que «como secretario general lo aceptaré como siempre he aceptado todas las directrices y decisiones del partido». Pero exige una » explicación clara y transparente para los militantes y la opinión pública».
La comparecencia de Costa se produce siete horas antes de la reunión del Comité Ejecutivo Regional del PPCV, que votará esta tarde la propuesta de «cese temporal» de Costa por su relación con los supuestos cabecillas de la trama ‘Gürtel’.
La cita comenzará a las 18.00 horas en la sede regional del partido y entre los «varios asuntos» que se tratarán en ella, además de la votación sobre el cese, figuran la lectura de los informes realizados por Costa y por el presidente del PPCV, Francisco Camps.