Un operativo de Cruz Roja, con lanchas y buzos, ha rescatado este miércoles a once de las veintidós personas que estaban atrapadas en viviendas y naves del pueblo cántabro de Caranceja, inundado por el desbordamiento del río Saja, mientras que a otras once las han dejado en sus casas por seguridad.
Según han informado a EFE fuentes del Servicio de Protección Civil del Gobierno e Cantabria, el operativo ha optado por dejar en sus casas a esas once personas porque el rescate resultaba peligroso.
El nivel del agua, que ha llegado a alcanzar en el pueblo un metro y medio, ya ha bajado 25 centímetros.
Los buzos han accedido a las naves y casas anegadas por el agua sobre las 12.00 horas, cuando se ha iniciado el rescate, y han comprobado que finalmente había 22 personas atrapadas.
Más de un metro y medio de agua
Una de las personas rescatadas, Ismael Querol, ha explicado a EFE que sobre las 12.00 horas, cuando se encontraba dentro de una nave acompañado por otras siete personas, cayó una «tromba de agua» que «en cuestión de minutos» inundó la zona e impidió que pudieran salir de la empresa para coger sus vehículos.
«Cuando intentamos ir hacia los coches había más de un metro y medio de agua, ha afirmado Ismael.
Los rescatados han sido evacuados por Cruz Roja y la Guardia Civil desde el acceso a Caranceja por la carretera nacional 634, ya que la carretera autonómica CA-903 ha sido cortada al tráfico porque el agua pasa por encima del puente por el que se accede al pueblo.