El presidente del Gobierno y líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunió con el secretario general del PSM, Tomás Gómez, a quien no pudo convencer de que abandone su idea de presentar su candidatura a la Presidencia de Madrid, lo que conducirá a unas elecciones primarias.
La reunión, que duró unas dos horas, se produjo sin previo aviso público y con discreción, tal y como pretendían ambos, justo un día después del encuentro oficial que iban a mantener el viernes en el Palacio de la Moncloa, que Zapatero anuló en el último momento.
Fuentes de la dirección federal del partido y del PSM explicaron que Zapatero trató de persuadir a Gómez de que la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, tiene más posibilidades que él de conseguir que el PP pierda la mayoría absoluta en Madrid.
Pero Gómez se mostró inflexible en cuanto a su candidatura y le trasladó que se trata de una «decisión colectiva» de los socialistas madrileños, adoptada tras un proceso de reflexión compartida de presentar su nombre.
Así las cosas, Zapatero y Gómez apostaron por «los mecanismos de democracia interna» que rigen en el PSOE para la elección de candidatos a las próximas elecciones autonómicas y municipales en la Comunidad de Madrid, lo que significa que, de presentarse algún otro aspirante, habrá elecciones primarias el 3 de octubre.
Trinidad Jiménez tendrá que formalizar sus intenciones antes del 25 de septiembre, fecha oficial de la proclamación de candidatos, porque el calendario del PSOE prevé que entre el 26 de ese mes y el 2 de octubre los distintos contendientes desarrollen su campaña interna.
Los mecanismos de democracia interna
Desde el PSM mostraron su plena confianza en que la Comisión Ejecutiva Federal «actuará con absoluta neutralidad» en el proceso de primarias.
Después de conocerse a primera hora de la noche de este sábado la celebración de la reunión, la Ejecutiva Federal del PSOE hizo público un comunicado, en el que se explica que Zapatero ha transmitido a Gómez su reconocimiento por la tarea realizada al frente del partido en Madrid, así como su derecho a ser candidato.
Zapatero le indicó su deseo de poner en marcha «los mecanismos de democracia interna» para que sean los militantes los que decidan quién será su candidato a la Comunidad de Madrid en las elecciones de mayo del 2011, postura con la que coincidió Tomás Gómez.
Los socialistas madrileños también emitieron un comunicado oficial, en el que, tras reiterar su «lealtad absoluta» al proyecto que lidera Zapatero, dejan claro que van a «continuar dando lo mejor» de sí mismos porque «Madrid se merece un cambio».
«Tenemos proyecto, tenemos equipos, tenemos liderazgo y estamos preparados para gobernar, subraya la nota del PSM, que hace hincapié en que en todo momento han promovido «el acuerdo, el entendimiento y la suma de esfuerzos entre todos los socialistas y el conjunto de la sociedad madrileña, sustituyendo la confrontación por la suma de esfuerzos».
Hasta la fecha, según recuerdan, la única candidatura propuesta es la de su secretario general, por lo que si otro compañero quiere optar a encabezar la lista, «en su legítima aspiración, tendrán que recurrir a las elecciones primarias.
Igualmente, hacen un llamamiento a la movilización de todos los militantes para que cuaje el proyecto político de los socialistas y lograr un cambio en Madrid.