La defensa del etarra Mikel Ibáñez Oteiza, que cumplía en casa, por motivos de salud, una condena de 27 años de cárcel por colaborar en el asesinato de Francisco Javier Zabaleta, en Elgoibar (Guipúzcoa) en 1988, ha recurrido la decisión de la Audiencia Nacional de ordenar ahora su ingreso en prisión.
Así lo han confirmado fuentes jurídicas, que han precisado que la sección segunda de la sala de lo penal de este tribunal dictó una providencia el pasado 15 de julio en la que acordó que Ibañez Oteiza ingresara de forma «inmediata» en el centro penitenciario.
El tribunal adoptó esa decisión a instancias del fiscal y «habiendo sido valorada recientemente la situación médica del condenado por el médico forense, que no ha apreciado «razones médicas que justifiquen una medida excepcional de mantenimiento» como la de la «prisión provisional (domiciliada), que era la que hasta ahora cumplía el terrorista.
Pese a que la sala ordenó su «inmediato ingreso» en prisión, el condenado no lo hizo al encontrarse hospitalizado en ese momento, situación que recoge otra providencia del tribunal dictada el 21 de julio mediante un escrito de su defensa y en la que se acuerda que dicha medida cautelar sea efectiva cuando el etarra sea dado de alta en el centro hospitalario.
Las fuentes consultadas han señalado que el tribunal dictó ayer una tercera providencia dirigida a la prisión de Martutene para recordar que en cuanto Ibañez Oteiza fuera dado de alta debía entrar en la cárcel, lo que ocurrió ayer mismo, puesto que el etarra ingresó «voluntariamente» en el centro penitenciario.
Por su parte, la defensa del condenado ha presentado un escrito pidiendo la suspensión de la medida adoptada, que deberá resolver la sala de vacaciones, formada por el presidente de la sección segunda de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional Fernando García Nicolás y los magistrados de lo contencioso-administrativo José Luis Gil y Elisa Veiga.
La Audiencia Nacional condenó en mayo de 2009 a Ibáñez Oteiza por facilitar a los tres miembros del «comando Eibar» que llevaron a cabo el asesinato información sobre las costumbres y horarios de Zabaleta, una sentencia que fue confirmada por el Tribunal Supremo el pasado mes de abril.
Después de los hechos Ibáñez Oteiza huyó a Uruguay, desde donde fue extraditado en 1994 por otra causa de la que fue absuelto y finalmente fue entregado a España en 2008 por Francia.