Más de un centenar de personas han asistido al funeral en Barcelona del histórico dirigente Carlos Hugo de Borbón Parma, fallecido este miércoles en a los 80 años de edad, entre familiares, amigos y miembros del Partido Carlista.
Los restos mortales del que fuera la cabeza dinástica de la Casa Borbón-Parma, la rama carlista que quiso poner a los Borbón Parma en el trono de España, serán trasladados este viernes a Holanda, donde tenía el título de príncipe, y finalmente a Parma (Italia), donde serán enterrados.
A las 17.00 horas han comenzado a llegar al tanatorio miembros del partido que Carlos Hugo presidió entre 1977 y 1979, así como familiares y amigos del difunto, para asistir a una ceremonia católica que ha comenzado a las 18.00 horas y a la que no han accedido los medios de comunicación por expreso deseo de la familia.
Han acompañado al féretro los hijos del difunto, Carlos Javier, Jaime, María Carolina y Margarita Borbón Parma, y sus hermanas María Teresa, Cecilia y María de las Nieves Borbón Parma.
En la capilla del tanatorio de Sant Gervasi, la familia ha depositado las coronas de flores enviadas por las autoridades holandesas y por los Reyes de España.
Mañana se trasladarán los restos a la capilla «Koepel van Fagel, en las inmediaciones del Palacio Noordeinde de La Haya, residencia oficial de la reina Beatriz de Holanda, donde la familia ya ha anunciado que no habrá posibilidad de que el público se despida del príncipe.
Carlos Hugo Borbón Parma, duque de Piacenza y Parma, se casó con la princesa Irene de Holanda en 1964, para lo cual la hermana de la reina Beatriz se convirtió al catolicismo.
El dirigente carlista fue el primer hijo varón de don Javier de Borbón Parma y Braganza y de doña Magdalena de Borbón Busset y era descendiente directo por vía paterna, al igual que la Casa Real española, de Felipe V, primer rey Borbón en España.