El secuestro de los cooperantes catalanes Albert Vilalta y Roque Pasqual, que habrían sido liberados este domingo , se ha convertido en el más largo perpetrado en la zona del Sahara por la organización de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) al cumplirse 267 días de su cautiverio.
Esta acción superó el triste récord que mantenía un matrimonio austríaco que estuvo ocho meses y ocho días en manos de este grupo terrorista, en el sur de Túnez.
Wolfgang Ebner y Andrea Kloiber fueron capturados el 22 de febrero de 2008 y puestos en libertad el 30 de octubre, por lo que dejaron anotados 252 días de cautiverio.
La red de Al Qaeda en el Magreb secuestró a los miembros de la ONG Barcelona Acció Solidaria el 29 de noviembre del pasado año en la principal carretera de Mauritania cuando iban en uno de los vehículos del convoy que transportaba ayuda humanitaria a Senegal. Su compañera Alicia Gámez fue apresada con ellos, aunque puesta en libertad el pasado 10 de marzo.
Se sospecha que Vilalta y Pascual hayan estado en algún punto del desierto de Mali, uno de los países donde AQMI ha intensificado su actividad en los últimos años.
El tercer secuestro más largo -184 días- fue el perpetrado sobre un grupo de europeos en varias acciones armadas en febrero de 2003 en el sur de Argel por el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate, organización argelina que derivó en AQMI en septiembre de 2006.
En total fueron 32 personas, en su mayoría de nacionalidad alemana, suiza y austríaca, integrantes de cinco caravanas. Los primeros 17 fueron liberados el 14 de mayo en una operación militar del ejército argelino en la región de Tamanrasset, en la que murieron nueve secuestradores.
Un segundo grupo de 14 rehenes quedó en libertad en Mali el 19 de agosto 2003, después de permanecer los tres últimos días en manos de los mediadores de este país, mientras que una turista alemana falleció por las duras condiciones del cautiverio y el calor.
AQMI también secuestró entre enero y julio de 2009 (172 días) a cuatro turistas europeos en Níger. De ellos, la alemana Mariane Petzold y la suiza Gabriela Greinier fueron puestas en libertad el 22 de abril.
La negativa británica a excarcelar a reos islamistas en Inglaterra motivó el asesinato de Edwen Byer, el 31 de mayo, mientras que el suizo Werner Greiner fue liberado el 12 de julio gracias al posible pago de un rescate.
En diciembre de 2008, también en Níger, fueron secuestrados dos funcionarios de la ONU junto con un conductor local. Después de 131 días, la red de Al Qaeda los dejó en libertad junto a las turistas alemana y suiza del otro secuestro.
Otro secuestro de larga duración fue el de los italianos Sergio Cicala y Filomene Kabouree en Mauritania, entre diciembre de 2009 y abril de 2010. Su cautiverio se prolongó durante 120 días después de que los terroristas exigieran la liberación de varios presos de su organización.
Los ciudadanos franceses también han sido víctimas de varios secuestros, como Pierre Camatte, que durante casi tres meses estuvo en manos de Al Qaeda hasta que fue liberado el pasado 23 de febrero en Mali después de que el Gobierno de este país excarcelara a cuatro presos de la red terroristas.
Peor suerte corrió su compatriota Michel Germaneau, de 78 años, raptado en Níger el pasado 19 de abril. Este cooperante fue asesinado el 26 de julio, pocos días después de que militares franceses participaran en una operación contra una base de AQMI en la que murieron seis de sus militantes.