Los aeropuertos españoles están recuperando el ritmo habitual de las operaciones aéreas, tras la reincorporación de los controladores a los centros de control y las torres aeroportuarias, mientras el ministro de Fomento, José Blanco anunció 442 expedientes disciplinarios a controladores.
En la última rueda de prensa que en principio dará el ministro, porque se está normalizando la situación, Blanco explicó que las sanciones derivadas de los expedientes serán individuales y pueden acarrear desde su archivo, a una sanción económica o a la pérdida del empleo.
El titular de Fomento, que se mostró confiado en solucionar los conflictos en ciernes de los trabajadores de AENA por la privatización parcial del ente y la huelga de pilotos, aún sin convocar, pero preparada por el SEPLA, dijo que ya fueron realizadas 1.580 operaciones desde la apertura del espacio aéreo, cerrado durante 18 horas, y ya fueron transportadas 162.000 personas.
AENA informó desde primera hora de la mañana de este domingo de normalidad en los centros de control y en las torres de los aeropuertos españoles con la incorporación, prácticamente total, de los controladores a sus puestos.
De los 296 controladores que debían incorporarse este domingo en su turno a las ocho de la mañana, lo hicieron 286, lo que a juicio del ente público supone «entrar en una situación de normalidad».
Blanco dijo en su comparecencia que en el turno de la noche se presentaron a sus centros de trabajo el 96% de los controladores y que en el turno de esta mañana lo ha hecho el 97%, «y los que no acudieron lo hicieron por causa justificada».
Negociaciones congleadas
Asimismo, Blanco reiteró que las negociaciones con USCA o con los controladores por el convenio colectivo no se van a retomar hasta que se acabe el Estado de Alarma dictado el pasado sábado por el Gobierno, que en un principio es por quince días.
La aplicación de las sanciones es algo, según Blanco, que está pendiente de la investigación judicial que se lleve a cabo, y añadió que la apertura de un expediente disciplinario puede suponer desde su archivo, hasta el despido definitivo, pasando por una suspensión de empleo y sueldo.
Según el titular de Fomento, los expedientes han sido abiertos contra aquellos trabajadores que adujeron enfermedad para no incorporarse a su puesto de trabajo sin que fueran presentados los justificantes oportunos, así como también a aquellos, entre otros, que no fueron a trabajar porque defendían que ya habían cumplido las horas que dicta la ley.
Blanco incidió en que tiene la «sensación» de que la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) pudo estar por detrás del abandono masivo de los puestos de trabajo de los controladores,algo que desde el sindicato se ha negado, pero quiso aclarar que es una «sensación» y que no «tengo ningún elemento al respecto», y añadió que «uno no se debe dejar llevar por las sensaciones».
Será, a su juicio, la investigación judicial la que dictamine si se trata de una actuación encubierta de USCA, o si se ha sido una reacción espontánea de los controladores.
Blanco defendió que las medidas adoptadas el viernes con el Real Decreto-Ley de medidas económicas en el que se incorporaba la regulación de la cantidad de horas máximas que deben trabajar anualmente un controlador, e indicó que «se ha demostrado que eran oportunas y acertadas».
Críticas a Rajoy
Respecto a las declaraciones realizadas por parte de algunos grupos políticos sobre la actuación del Gobierno, Blanco dijo que no quería entrar en ellas porque en este momento «mi única preocupación es la situación de los ciudadanos que se han visto implicados estos días en la actuación de los controladores».
No obstante, el ministro de Fomento señaló que, a su juicio, «Rajoy no ha dado la imagen que debía ante esta situación», y no se le ha escuchado «decir lo que había que hacer».
Respecto a la evaluación de los daños económicos ocasionados por la «desbandada» de los controladores, el ministro consideró que «habrá que esperar unos días, tanto para cuantificarlos económicamente como en la cifra de personas afectadas».