Estados Unidos ha ofrecido a España que sus técnicos visiten próximamente un emplazamiento de rehabilitación en aquel país para compartir experiencias que permitan avanzar en el proceso de limpieza de los terrenos de Palomares (Almería).
Éste es uno de los puntos mencionados en el comunicado conjunto emitido al final de la reunión que las delegaciones técnicas de los dos países celebraron ayer en Madrid.
Ambas delegaciones visitaron los terrenos de la localidad almeriense contaminados desde hace 45 años cuando un bombardero estadounidense chocó en pleno vuelo con un avión nodriza, lo que causó la caída de cuatro bombas termonucleares, que no llegaron a explosionar, pero liberaron plutonio radiactivo.
La delegación estadounidense, encabezada por el director de la Oficina de Salud, Seguridad y Protección del Departamento de Energía, Glenn Podonsky, se reunió desde el 22 de febrero con otra española, liderada por Cayetano López Martínez, director del CIEMAT (Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas).
En el comunicado conjunto se cita que, durante las reuniones de trabajo, los miembros de la delegación norteamericana, algunos de ellos no implicados en anteriores visitas, ofrecieron sugerencias basadas en más de 25 años de experiencias de soluciones en los centros de Estados Unidos.
«Además de visitar Palomares, las reuniones técnicas incluyeron exposiciones de la delegación española sobre la situación del terreno de Palomares y el PRP (Plan de Rehabilitación de Palomares), discusiones sobre métodos de rehabilitación, incluida la experiencia de los Estados Unidos en excavación, almacenamiento y disposición de tierra contaminada por plutonio, así como un repaso a posibilidades y opciones de rehabilitación», añade el comunicado.
La visita, se indica en la nota, es el resultado de una «estrecha y continua cooperación entre los Gobiernos de España y Estados Unidos».
Según el estudio de caracterización del CIEMAT, en el subsuelo de Palomares todavía quedan unos 6.000 metros cúbicos de tierra contaminada repartidos en tres grandes áreas y una superficie total de 41 hectáreas.
Cayetano López explicó el miércoles pasado que el objetivo de esta visita era obtener «asesoramiento» de Estados Unidos en los planes del Gobierno español, que pasan por la «limpieza completa de Palomares».
López Martínez advirtió de que la rehabilitación de los terrenos exige un «proceso largo» e insistió en que el destino final de los residuos o el plazo de ejecución de los trabajos de limpieza dependen de «decisiones políticas» que han de adoptar los gobiernos estadounidense y español.
Redacción