El colectivo ‘Queda la palabra’ alerta de que en las asambleas que se están llevando a cabo con el movimiento 15M hay «infiltrados», trabajadores del Centro Nacional de Intelegencia (CNI), «personas muy bien entrenadas y pagadas por los servicios de inteligencia e incluso en algunos casos por los partidos políticos mayoritarios».
Su objetivo es «desmontar cualquier intención de construcción colectiva del Pueblo». «Son personas de cualquier edad o sexo e incluso nacionalidad y de cualquier aspecto físico en su forma de vestir que se hacen pasar por indignados», señala el colectivo.
Estos infiltrados «van recogiendo información de lo que ocurre en las acampadas y en sus asambleas, toman nota de las decisiones que se van tomando, realizan fotografías y vídeos continuamente, estudian y envían información sobre los que están más implicados como los líderes naturales, miden el grado de motivación y reciben órdenes muy precisas para tratar de manipular en las asambleas con sencillas técnicas».
Así, aseguran que tienen unas características personales y de comportamiento muy concretas que permiten identificarlos si se observa con detenimiento. «Van vestidos de forma moderna o clásica sencilla pero su cara y los gestos que ésta representa los delatan como personas nada tranquilas ni pacíficas», apuntan.
También señalan que aparentan ser «muy sociables pero siempre tratan de imponer su punto de vista intentando convencer de asuntos que de primera no suenan nada claros ni congruentes». «A veces ocupan mucho tiempo en su turno de palabra en las asambleas poniéndole «pegas» continuas a asuntos de base muy importantes», continúan.
En la misma dirección, explican que estos «infiltrados» prefieren la votación por mayorías y «no les gusta el consenso, aunque cuando no tienen más remedio aparentarán estar de acuerdo con el consenso grupal para pasar inadvertidos, pero bloquearán esta forma realmente democrática una y otra vez».
Ante esta situación, han sugerido que se unan personas que se conozcan desde hace «mucho tiempo» en la acción social pacífica e independiente para que no haya problemas de «confianza» y que hagan «un grupo de observación y puesta en común de percepciones dentro de las asambleas sin, en principio, comunicárselo a nadie».
«Una vez descubiertos éstos traidores, debéis denunciarlos en las asambleas ante todos y expulsarlos sin ningún reparo de que sea antidemocrático, lo realmente antidemocrático es lo que hacen estos traidores del Pueblo», han añadido, al tiempo que han señalado que el CNI «está actuando de forma totalmente ilegal y antidemocrática contra el Pueblo que pacíficamente protesta contra la corrupción y el robo de la clase política».
El CNI niega realizar actividades en el movimiento
Un portavoz del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha asegurado que el organismo no está realizando actividades de inteligencia en relación con el movimiento del 15 de mayo.
A este respecto, ha señalado: «El CNI desea aclarar que no realiza actividades de inteligencia en relación con el movimiento 15 M, cuyas acciones no se encuentran contempladas en los supuestos del artículo 1 de la ley 11/2002 de 6 de mayo, reguladora del Centro Nacional de Inteligencia».